La enfermera de un hospital en Chattanooga, Tennessee, que se desmayó luego de que le administraran la vacuna de Pfizer el pasado jueves contra la COVID-19 dijo que padece de una condición que cuando siente dolor, se marea.
El reporte de Associated Press indica que Tiffany Dover, una de los cinco primeros trabajadores de la salud que fueron inmunizados contra el coronavirus en el referido estado, perdió el conocimiento momentáneamente mientras las cámaras de televisión transmitían el procedimiento.
Varios minutos después de la administración de la vacuna, cuando los reporteros la estaban entrevistando, Dover se puso la mano en la cabeza, y se disculpó indicando que se sentía mareada.
En las imágenes, se ve a la enfermera desfallecer mientras los doctores la sostienen y la colocan en el suelo. Rápidamente, la mujer se reincorpora.
Los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) cuentan con reportes de personas que se han desmayado como resultado de la inoculación, efecto asociado con la ansiedad o el dolor que le produce el proceso.
Sin embargo, posteriormente, Dover rechazó que haya sido resultado directo de la inyección de la vacuna.
El Dr. Jesse Tucker, director médico de cuidado crítico en el hospital, dijo a reporteros de WTVC que las vacunas pueden provocar esa reacción en algunas personas.
“Es una reacción que puede pasar muy frecuentemente con cualquier vacuna o inyección”, indicó. (eldiariodeny)