Primicia Honduras Diario Digital 
El sector de personas con discapacidad solicitó hoy al Presidente de la República Juan Orlando Hernández que abogue por ellos ante las instancias correspondientes de su gobierno para que les agilicen los desembolsos del presente año para hacerle frente a la pandemia del COVID-19 que los mantiene en calamidad doméstica por la falta de recursos, alimentos y medicinas.
“Nuestra intención no es enumerar un cumulo de necesidades, pretendemos, eso sí, una mirada más atenta y humana de su gobierno hacia las personas con discapacidad” reza un documento público leído por la presidenta de la Coordinadora de Instituciones y Asociaciones de Rehabilitación de Honduras (CIARH), Blanca Barahona.
La Federación Nacional de Organismos de Personas con Discapacidad de Honduras (FENOPDIH), la Federación Nacional de Padres de Personas con Discapacidad de Honduras (FENAPAPEDISH) y la CIARH, que aglutinan en su seno a más de 45,000 personas, expresaron su preocupación por la falta de asignación presupuestaria con que cuentan para brindarle la atención que requieren las personas con discapacidad en el país.
Las tres organizaciones piden al mandatario hondureño la agilización del desembolso del proyecto de emergencia Covid-19, para la adquisición de alimentos y material sanitizante asignado a las organizaciones y gobiernos locales para las personas con discapacidad.
Además, le instan a girar instrucciones a la Secretaría de Finanzas para que a la brevedad haga efectivos los desembolsos del primero y segundo trimestre.
Asimismo, que instruya a esa Secretaría, para que realice el blindaje y aprovisionamientos necesarios para que los desembolsos correspondientes, entregados a través de la Secretaria de Inclusión Social sean otorgados en el tiempo ya establecido.
Anualmente el estado hondureño asigna unos 29 millones de lempiras para el sector de personas con discapacidad, un promedio de 24 lempiras anuales por persona, lo que resulta insuficiente principalmente en una situación de emergencia como las que se vive con la actual pandemia.
Se estima que, en Honduras, alrededor de 1.2 millones de personas cuentan con alguna discapacidad y es considerado uno de los sectores del país que vive en pobreza extrema, misma que se ha visto afectada por la cuarentena decretada desde hace casi tres meses.
Las personas con discapacidad, a nivel nacional, que cuentan con el carnet expedido por la Dirección de Discapacidad, también urgen de un bono solidario por un monto digno y superior a la cantidad que inicialmente se les otorgaba.
Bonos que según las tres organizaciones que defienden los derechos de las personas con discapacidad deben ser pagados por medio del sistema de la banca para facilitar la movilización y disminuir el riesgo de contagio del Coronavirus (COVID-19).
Finalmente, piden al gobernante hondureño que interponga sus buenos oficios para que la Secretaría de Desarrollo e Inclusión Social que dirige Reynaldo Sánchez cumpla con el compromiso adquirido en marzo, recién pasado, junto a la Secretaria de Finanzas que acordaron se les entregaría un fondo de 10.5 millones de lempiras a partir del tercer trimestre del presente año.
Desde mayo pasado, el sector de personas con discapacidad de Honduras se declaró en “calamidad doméstica” y urgió al gobierno, alimentos, medicinas y presupuesto, demandas que aún no han sido resueltas.
