Los últimos 197 privados de libertad del centro penal de Santa Bárbara fueron trasladados a la cárcel de máxima seguridad El Pozo en Ilama y a la cárcel de Támara en Francisco Morazán.
Este miércoles el recinto penitenciario de Santa Bárbara quedará vacío al igual que el penal sampedrano que está desocupado desde el 15 de octubre.
El traslado lo realizaron agentes del Instituto Nacional Penitenciario (INP), la Policía Militar y efectivos de la Fuerza de Seguridad Interinstitucional Nacional (Fusina).
Con esta acción, el centro penal queda totalmente y vacío tal como lo anunció en su oportunidad el presidente Juan Orlando Hernández.
El pasado 3 de noviembre fueron trasladados desde el centro penal de Santa Bárbara 320 privados de libertad hacia la cárcel de El Porvenir, Francisco Morazán.
Con el cierre del centro penal de Santa Bárbara, se beneficiará a los habitantes de esta occidental ciudad ya que por su ubicación en el propio caso urbano generaba muchos problemas para ellos.
Vecinos enfrentaban problemas
Debido a que la cárcel está ubicada en el centro de la ciudad, las personas que habitan en vecindarios aledaños enfrentaban problemas de comunicación ya que está bloqueada la señal de telefonía móvil y de Internet.
Recientemente fue clausurado el centro penal sampedrano después de funcionar en plena ciudad industrial en las últimas seis décadas.
El hacinamiento en el que se encontraban los reclusos dio pie a que las autoridades optaran por movilizarlos a las cárceles de El Porvenir, Francisco Morazán, El Pozo en Ilama Santa Bárbara y la cárcel de mediana seguridad, La Tolva en Morocelí, El Paraíso.
Según datos del Instituto Nacional Penitenciario esta cárcel alcanzó una población de tres mil 227 reclusos, aunque inicialmente fue construida para albergar a 800 privados de libertad.
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