Al menos siete hondureños, entre estos dos niños y un septuagenario, resultaron quemados por manipulación de pólvora durante Noche Buena en San Pedro Sula y Tegucigalpa reportaron autoridades.
En el Hospital Mario Catarino Rivas de San Pedro Sula ingresaron cinco pacientes quemados, informó la portavoz de ese centro asistencial, Julia Sánchez.
Entre los cinco ingresos se registran un adulto mayor 71 años, a quien le explotó una bomba en su mano izquierda y dos menores de edad procedentes de Peña Blanca, Santa Cruz de Yojoa, Cortés.
A uno de los menores le explotó un mortero y sufrió lesiones en ambos ojos y ambas piernas, mientras al otro le explotó un potente cohete en su mano derecha.
La lesión provocó amputación del dedo índice, precisó Sánchez. Los otros tres pacientes corresponden a adultos procedentes de Villanueva y Santa Bárbara.
Mientras, en Tegucigalpa, dos personas adultas fueron llevadas con quemaduras a la sala de emergencias del Instituto Hondureño de Seguridad Social (IHSS).
El primer caso se trata de una persona de 28 años, a quien, tras la explosión de un cohete, tuvo lesiones en la vista. De igual manera, un hombre de 40 años, sufrió quemaduras en su mano al explotar un mortero, provocándole la mutilación parcial de un dedo.