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Una nueva caravana de migrantes empezó a formarse esta noche para salir temprano este viernes desde la Central Metropolitana de buses en el bulevar del sur de San Pedro Sula en el departamento de Cortés, zona norte de Honduras.
Como a las 8:00 de la noche ya sumaban alrededor de cien hondureños, en su mayoría hombres, decididos a movilizarse, pese a las fuertes medidas de seguridad que ejerce la policía y el Ejército de Guatemala, desde la Aduana de Corinto.
Todos tienen cómo meta salir este 30 de octubre rumbo a Guatemala y cruzar al Estado de Chiapas, México en su travesía hacia los Estados Unidos.
“Vengo de Choloma, ya no puedo vivir allí” dijo uno de los migrantes con su gorra acomodada hacia adelante para no ser reconocido.
“Yo me vine de Morazán, Yoro, solo le dije a mi familia, me voy en la caravana para ver el cambio en mi vida. No tengo trabajo” dijo por su parte un jovencito de apenas 15 años de tez trigueña, sin mascarilla.
Otro de apariencia campesina, relató que “Yo vengo de Olancho, vi en las redes sociales que estaban convocando para viajar en caravana y no lo pensé dos veces y aquí estoy. Solo les dije a mis hijos recen por mi”.
En el año, es la sexta movilización que busca llegar a Estados Unidos en lo que ha transcurrido de 2020 y la segunda en un período de un mes, con el grupo de 2,500 personas que salió el 1 de octubre desde este mismo sector de San Pedro Sula.
En la convocatoria que aparece en redes sociales se coordina la nueva caravana para pobladores de todos los departamentos de Honduras, pese a los ruegos que se corren por la pandemia del COVID-19, similar al desplazamiento anterior.
Los relatos son similares también en el sentido de que la pandemia ha empeorado la condición económica en Honduras, hasta caer en una pobreza extrema, que nunca habían experimentado.
Aparentemente existe una lista superior a 2 mil personas confirmadas que podrían salir del país en esta nueva caravana de migrantes.
