En opinión de especialistas, en Honduras ya se debería de declarar alerta ante la propagación del virus que causa la influenza.
El peligroso virus denominado Influenza A (H3N2) que circula en el país ya cobró la vida de dos personas a causa de la gripe estacional.
En tal sentido, infectólogos son del criterio que rápidamente se están multiplicando los episodios de influenza, lo que podría llevar a una complicación de la epidemia.
En estas circunstancias se ha recomendado extender la cobertura de la vacunación. Con primordial atención a los enfermos cardíacos y a los que presentan padecimientos en sus vías respiratorias.
En el caso de los pacientes con problemas en el funcionamiento de sus pulmones. Los que se ha alertado a que acudan de inmediato al médico para evitar una complicación.
Un especial énfasis se ha hecho sobre la necesidad de tomar medidas de prevención como el lavado de manos. Asimismo no tocar puertas y pasamanos que pudiesen haber sido manipuladas por personas contaminadas.
Casos en aumento en el HEU
Solamente en el Hospital Escuela Universitario se ha presentado un aumento entre el 10 y el 15 por ciento. Esto en los casos de enfermedades respiratorias virales con impacto especial en la población infantil.
Los datos estadísticos recopilados en la red de salud del país, reflejan que en lo que ha transcurrido de este año al menos tres mil adultos mayores. Y al menos 1,400 niños menores de cinco años han sido afectados por cuadros de influenza.
Se sabe que la tasa de incidencia vinculada con la enfermedad entre las personas de 60 años y más es de 16 por cada cien mil habitantes. Y entre los infantes es de 58 por cada cien mil personas.
La influenza es una enfermedad respiratoria y contagiosa diferente del resfrío. Por lo general, la llamada gripe estacional comienza de repente y los pacientes presentan algunos o todos los síntomas. Los que están relacionados con fiebre, tos, dolor de garganta de cabeza y musculares, mucosidad nasal, fatiga e incluso vómitos y diarrea.
DATO
En 2009 se reportó la primera víctima mortal de la influenza. Ocho años después, se registran dos muertes desencadenadas por la misma enfermedad.