Primicia Honduras Diario Digital Autor: Dr. Carlos Colombo
Desde la elección del presidente Donald Trump, la inmigración ha sido un tema que genera división en los Estados Unidos. La administración Trump ha adoptado una visión de línea dura en contra de todas las formas de inmigración, incluyendo muchas formas de inmigración legal. Sin embargo, la mayoría de los estadounidenses aún creen firmemente en la inmigración como una tradición valorada que fortalece al país.
Para los sudamericanos, existen numerosas opciones a fin de obtener una visa a los Estados Unidos. Hay dos categorías de visas estadounidenses: de inmigrantes y de no inmigrantes. Una visa de inmigrante es expedida a una persona que desea vivir en los Estados Unidos en forma permanente. Generalmente, a una persona se le otorga una visa, luego puede obtener una residencia permanente (una green card), y finalmente, la ciudadanía. Las visas para no inmigrantes son emitidas a las personas que desean venir a los Estados Unidos de manera temporal. Estas pueden ser emitidas por una variedad de razones, tales como negocios, estudios, tratamiento médico o trabajo temporal.
Hay tres tipos principales de visas de inmigrantes disponibles para los hondureños: las visas de familia, visas de empleo y otras visas. Las visas de familia son aquellas que están disponibles debido a una relación específica con un ciudadano o residente permanente de los EE. UU. Por ejemplo, si su prometida es ciudadana estadounidense, usted puede ser capaz de obtener una visa K-1 para ingresar a los Estados Unidos para casarse y vivir en este país. Otras visas familiares permiten a familiares específicos ingresar a los Estados Unidos si son patrocinados por un familiar ciudadano de los EE. UU. Si bien las visas con base en la familia son una forma tradicional para la inmigración a los Estados Unidos, actualmente están bajo el ataque de la administración Trump. Hasta la fecha, no se han hecho cambios al programa.
Las visas de empleo son aquellas que están directamente vinculadas al trabajo o destrezas laborales de una persona. Estos tipos de visas de inmigrantes son a menudo solicitadas por un empleador, pero en algunos casos, una persona puede solicitar una visa de empleo. Por ejemplo, si una persona es un “extranjero con capacidades extraordinarias”, él o ella pueden calificar para una visa de inmigrante para ingresar a los Estados Unidos. Otras visas “de empleo” requieren una inversión y pueden proporcionar un camino a la ciudadanía. Al igual que las visas con base en la familia, las visas de empleo también han sido cuestionadas por el presidente Trump, específicamente a través de su directiva “Comprar estadounidense, contratar estadounidense”, la cual prioriza el empleo de trabajadores estadounidenses.
Finalmente, las visas de residentes que regresan son un tipo específico de visa para personas que tuvieron estado legítimo de residente permanente en los Estados Unidos y estuvieron fuera de los EE. UU. por más de un año por razones fuera de su control.
También existen varias visas de no inmigrantes disponibles para residentes de Honduras. Las más populares incluyen las visas B-1 y B-2, que son visas temporales para viajes de negocios (B-1) y placer (B-2). Otros tipos de visas de no inmigrantes son específicas para ciertas situaciones, tales como trabajadores agrícolas temporales o trabajadores zafrales, o visas de empleo para empleados que han sido trasferidos a una entidad con sede en los EE. UU. de su compañía. Las visas de estudiantes son otra opción para los ciudadanos hondureños que deseen obtener una educación en los Estados Unidos. Hay varias visas de no inmigrantes que están designadas para abordar situaciones específicas, cada una de las cuales podría ser usada por un ciudadano de Honduras para visitar y/o trabajar en los Estados Unidos en forma limitada.
Si bien en algunos aspectos puede ser más difícil obtener una visa para ingresar a los Estados Unidos, existen aún numerosas opciones disponibles para los peruanos. A pesar de la presión política ejercida sobre el sistema inmigratorio por el presidente Trump, trabajar o vivir en los Estados Unidos sigue siendo una posibilidad.
Sobre el Autor
Carlos Colombo, es un abogado residente en Orlando. Socio fundador de la firma de abogados Colombo & Hurd, PL, en la cual lidera las prácticas de derecho corporativo, internacional e inmigración de la firma. Ayuda a individuos en la obtención de visas temporales y estatus de residente permanente en una variedad de categorías de visas.
