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El proceso electoral de Honduras fue una farsa porque están rellenando urnas, cambiando actas y haciendo una suciedad que nos hace concluir que, en este proceso, en el que se gastó 2,800 millones de lempiras, que yo estoy seguro que este proceso se hace con mucho menos de 500 millones de lempiras, denunció a través de redes sociales el designado presidencial, Salvador Nasralla.
“Seguiremos en manos de los dueños de las drogas”, alertó también Nasralla, por lo que pidió no “empalagarse tanto, que desde la Presidencia de la República “se puede hacer algo”.
“Este proceso fue un proceso robado que permitió que fuera violenta. Tú no fuiste tomado en cuenta, ese resultado no corresponde a tu voluntad y se lo digo de frente a los del Consejo Nacional Electoral, en las juntas receptoras de votos, había tres representantes, uno del Partido Nacional, uno del Partido Liberal y otro del Partido Libre”.
“Claro el Partido Libre dijo públicamente que se iban a defender los votos, pero una cosa es lo que se da como orden a nivel nacional y otra los intereses puntuales que existen en cada una de las 18 mil y pico de mesas y otra vez el poderoso billete de la droga, de la cocaína, estuvo en todas las mesas electorales”.
“Seguiremos en manos del crimen organizado. Seguiremos en manos de los dueños de la droga. Se los repito por si creen que me equivoqué, no crean que me equivoqué, no seguiremos en manos del crimen organizado”.
“Seguiremos en manos de los dueños de las drogas y por favor medios de comunicación no se empalaguen, tanto con lo que ustedes creen, que se puede hacer desde la presidencia de la República, porque no se puede”.
“40% del Partido de Salvador de Honduras y 30% del Partido Libre en el nivel presidencial, hay mucha gente que me detiene por las calles y me dice usted es nuestro presidente”, señaló.
Nasralla manifestó que el próximo 27 de enero pedirá que regrese la Misión de Apoyo Contra la Corrupción e Impunidad en Honduras (MACCIH), para retomar la investigación de la corrupción en el país.
“Quiero ver de nuevo a Juan Jiménez Mayor y a los que estaban con la MACCIH, los que descubrieron a los ladrones en el Congreso Nacional, no quiero una nueva misión que venga aquí a empezar de cero, si puede venir también Velásquez, que lo sacaron de Guatemala, que lo haga, que vengan porque Honduras es un país que necesita una misión para combatir la corrupción y la impunidad, que fue una idea que nació de nosotros cuando teníamos el Partido Anticorrupción en 2015”, detalló.
No obstante, ante los pocos diputados que ese instituto político tendrá en el próximo Congreso Nacional, explicó que “cuando hicimos la alianza quedó clara la oferta del Partido Libertad y Refundación (Libre), con su estructura, sin embargo, la defensa del voto prácticamente no existió, estoy más que seguro que tenemos 25 a 30 diputados”.
“Nos dieron una credencial para observador y nos las entregaron el sábado 27 de noviembre, para que no las pudiéramos entregar, todo lo hacen con premeditación, alevosía y ventaja, la determinación de que el Partido Salvador de Honduras, no tuviera representación en las mesas, es por culpa mía, porque el enemigo a vencer, el que metió la palabra anticorrupción en Honduras el verdadero enemigo de los corruptos es Salvador Nasralla por eso me mantienen alejado lo más posible”.
Siguió que uno de los propósitos que les obligó a participar en alianza fue que el sistema hondureño de elecciones no permitió tener al Partido Salvador de Honduras (PSH), tener representantes en las Juntas Receptoras de Votos (JRV).
“La gente en su mayoría quería votar por el Partido Salvador de Honduras y por el Partido Libre en lugar de participar solos, decidimos aceptar la oferta de Libre, para hacer una unidad, y con la sólida estructura orgánica de Libertad y Refundación que no se puede cuestionar”, concluyó.
