El Ministerio Público de Honduras denunció que las investigaciones sobre las muertes registradas después de las elecciones generales del 26 de noviembre de 2017 en el país son “obstaculizadas” por la Policía Militar del Orden Público (PMOP).
La Fiscalía indicó en Twitter que fiscales adscritos a la Fuerza de Seguridad Interinstitucional Nacional (Fusina) realizan “diligencias investigativas” en la Unidad de Información e Investigación Criminal de la Policía Militar en seguimiento a los casos de muertes registradas durante la crisis postelectoral.
Sin embargo, el Ministerio Público aseguró que las investigaciones “están siendo obstaculizadas por las autoridades de ese destacamento (militar)”.
Según la legislación hondureña, añadió, el Ministerio Público “no podrá ser obstaculizado, impedido, ni limitado en forma alguna por ninguna autoridad”.
“Todas las autoridades civiles y militares de la República estarán obligadas a prestar la colaboración y auxilio que se requiera” por parte del Ministerio Público.
Los funcionarios y empleados que “negaren injustificadamente la colaboración y auxilio solicitados, serán sancionados como infractores de los deberes de su cargo y desobediencia a la autoridad. Los Fiscales adscritos a Fusican aplicarán la Ley”, señaló el organismo hondureño.
Durante las protestas en el período electoral, según un informe de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas de Derechos Humanos (Acnudh) divulgado en marzo de 2018, “por lo menos 22 civiles y un agente de la Policía Nacional murieron”.
Del total, detalla el documento, al menos 16 de las víctimas, entre ellas dos mujeres y dos niños, murieron violentamente a causa de balazos efectuados por las fuerzas de seguridad.
El informe del Acnudh documenta también las muertes de 15 personas, entre los que “figuran candidatos políticos, consejeros municipales y activistas”, en el período anterior a las elecciones de noviembre.
La crisis en Honduras surgió a raíz de que el candidato presidencial de la otrora Alianza de Oposición contra la Dictadura, Salvador Nasralla, no reconoció las elecciones de noviembre, en las que Juan Orlando Hernández fue reelegido, aduciendo fraude.