Las fuerzas vivas de la aldea El Guante, Cedros, se unen para exigir un alto a la tala ilegal del bosque ante el aparente desaparecimiento de importantes fuentes de agua, el hábitat de aves y animales, con enormes daños ambientales para la comunidad y sus alrededores.
Según denuncias, sujetos pertenecientes a un aserradero del sector de Río Dulce, en Talanga, invaden propiedades privadas para marcar en forma selectiva los árboles de pino y especies maderables, para luego cortarlos.
Los lugareños, insisten que la condenable acción avanza a través de reservas y fuentes de agua, al tiempo que piden apoyo de las autoridades y de la Presidenta Xiomara Castro.
En tanto, los guanteños advierten que de no haber intervención se tomarán justicia por su propia mano contra los depredadores del bosque.
En ese sentido, los afectados no se explican cómo estos madereros han actuado a la vista y paciencia de las autoridades.