En su informe de su 77 Asamblea General la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP), reveló que los peligros contra el ejercicio del periodismo persisten y que a ellos se les suma los obstáculos que representa la suspensión de garantías constitucionales a causa de la pandemia.
«Si bien no se produjeron asesinatos contra periodistas, muchos fueron contagiados por el virus, entre ellos el periodista Mauricio Torres Molinero, quien falleció el 10 de julio, así como Noé Mejía, de Radio América, el 5 de julio», indicó la SIP en el informe que deberá ratificar el comité de Libertad de Prensa.
Además, algunas asociaciones se expresaron sobre la necesidad de la rendición de cuentas para combatir el virus de la desinformación y denunciar violaciones a los derechos humanos y abusos de poder.
La SIP, con sede en Miami, EE.UU., recordó que en mayo de 2021, el Colegio de Periodistas de Honduras (CPH) se reunió con el presidente de la Corte Suprema de Justicia, Rolando Argueta, quien consideró procedente la inclusión de salvaguardas al derecho a la libre expresión de periodistas y propondrá un dictamen con nuevas reformas al Código Penal.
«El delito de difamación fue eliminado en 2020 del Código Penal, pero todavía contiene las figuras de injuria y calumnias», indicó el organismo, que agrupa a propietarios, editores y directores de medios de comunicación, principalmente de prensa escrita, de América.
Señaló además que el presidente hondureño, Juan Orlando Hernández, aún no respondió a la petición de diferentes sectores para reformar la «Ley para la Clasificación de Documentos Públicos Relacionados con la Seguridad y Defensa Nacional», debido a que la «Ley de Secretos», como se le conoce popularmente, vulnera el derecho de acceso a la información pública y el principio de transparencia.