Unos 1.522 estudiantes de todos los niveles educativos fueron asesinados en Honduras entre enero de 2010 y marzo de 2018.
Así lo informó la directora del Observatorio de la Violencia de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), Migdonia Ayestas, quien a la vez dijo que de las 1.522 estudiantes víctimas, 802, que representan el 52,6 %, eran del nivel medio.
De otras 343 personas, (el 22,5 %) no fue posible determinar su nivel educativo, indicó Ayestas durante la presentación del estudio en la UNAH.
De los estudiantes fallecidos 226 cursaban el nivel superior (universitarios) y 151 de educación primaria.
De los 226 estudiantes universitarios muertos, 121 eran de la UNAH, quienes hoy fueron recordados por decenas de alumnos de la institución con una vela y la exigencia a las autoridades del país de “cero impunidad”.
El informe destaca además que “de los homicidios de estudiantes universitarios, el 77,9 % eran hombres y el 22,1 % mujeres”, y que el grupo más vulnerable para ambos sexos es el de jóvenes entre los 20 y 29 años.
Ayestas señaló que, según la Unidad de Registro de la UNAH, los universitarios que murieron desde 2010 a marzo de 2018 pertenecían a 37 carreras, de las que las más afectadas fueron Medicina, Informática, Pedagogía, Ingeniería civil, Enfermería, Derecho, Psicología, Odontología y Periodismo, con el 52 %.
El estudio subraya que “la niñez y la juventud son los principales activos de la sociedad” y que “en Honduras ser joven es el principal factor de riesgo para ser víctima de la violencia”, flagelo que desde 2010 a marzo de 2018 dejó 26.714 muertes violentas.
Hace seis años Honduras registraba cerca de 90 homicidios por cada 100.000 habitantes, cifra que, según fuentes oficiales, a 2017 se había reducido a 42,8 %, lo que en opinión del presidente del país, Juan Orlando Hernández, todavía sigue siendo alta y el esfuerzo es bajarla a 11 entre 2018 y 2019.