El Comisionado Nacional de los Derechos Humanos (Conadeh), Roberto Herrera Cáceres, hizo un llamado al gobierno y la sociedad civil a hacer fuerza común para defender y apoyar a los inmigrantes hondureños.
Debemos unir la acción coordinada del gobierno con la sociedad civil y el Comisionado Nacional de los Derechos Humanos (CONADEH), para trabajar conjuntamente y apoyar a los inmigrantes que están siendo afectados no solo por los desastres naturales sino que por algunas decisiones en el extranjero, apuntó.
Herrera Cáceres, lamentó la decisión ejecutiva, tomada en los Estados Unidos de América, de revocar, el programa de protección de la deportación, a miles de jóvenes inmigrantes, conocido como DACA (Deferred Action For Childhood Arrivals).
El pasado 5 de septiembre, el presidente estadounidense Donald Trump ordenó la eliminación del programa Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA, por su sigla en inglés), producto de una orden ejecutiva de Barack Obama, que protegía a los jóvenes sin documentos de la deportación y pidió al Congreso de Estados Unidos que lo remplace con leyes antes de que expire por completo el 5 de marzo de 2018.
Se calcula que más de 750.000 inmigrantes indocumentados están adscritos al programa, de los cuales unos 21,000 son hondureños.
Responsabilidad
El Ombudsman expresó su preocupación y destacó la responsabilidad que hay de proteger y respetar la dignidad del ser humano en donde se encuentre, ya que sus derechos humanos son universales.
Señaló que los jóvenes que podrían ser afectados por esa decisión han sido valorados por sus aportes constructivos a la sociedad norteamericana, y, por todo ello, en el período de 6 meses que se ha dado para que el congreso norteamericano adopte legislación aplicable, es crucial hacer incidencia en los legisladores de ese país.
Lo importante es lograr una legislación que permita una solución favorable permanente, tanto para los inmigrantes hondureños como para todas las personas que se encuentran en esa situación, precisó.
Agregó que, mientras tanto, se les debe brindar todo el respaldo legal que necesiten para que ejerzan su derecho al debido proceso u otras medidas basadas en los tratados de derechos humanos y que sean parte de la legislación federal norteamericana y del Derecho Internacional Consuetudinario, para contribuir oportunamente con la solución y no esperar únicamente lo que sucederá al final del período de seis meses.
Recomendó empezar a activar en los Estados Unidos con aquellas personas que pueden influir en el ánimo de los legisladores, de las personas en el Senado para lograr una legislación que tome en cuenta las condiciones del inmigrante.
Unidad nacional
Añadió que como hondureños debemos tratar ese tema y así dar una visión en conjunto para proteger a nuestros inmigrantes indocumentados, a los inmigrantes afectados por los fenómenos naturales, al inmigrante joven, al que es padre y al inmigrante trabajador.
Sostuvo que una tarea importante es que haya unidad nacional e internacional entre el gobierno, sociedad civil, el CONADEH y muchas organizaciones norteamericanas que colaboran poniendo a disposición abogados que no cobran honorarios y que trabajan con nuestras comunidades.
Como ente del Estados hondureño estamos para acompañar, escuchar y buscarle solución a los problemas de nuestras inmigrantes, expresó.
Añadió que, de ahora en adelante, no se les tiene que dejar solos y que lo importante es romper esa práctica del pasado que solo estábamos dependiendo de ellos e indiferentes a sus sufrimientos.
Finalmente indicó que promoverá acciones en el Consejo Centroamericano de Procuradores de Derechos Humanos (CCPDH) y ante la Federación Iberoamericana de Ombudsman (FIO), para encontrarle una solución a esta problemática que afecta a miles de inmigrantes.