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El presidente Juan Orlando Hernández afirmó que “una decisión contraria con la ampliación del Estatus de Protección Temporal (TPS, por sus siglas en inglés) y su regularización definitiva va en contra de los principios que sirven de fundamentos para el Plan Alianza para la Prosperidad” del Triángulo Norte de Centroamérica.
“Yo lamentaría mucho y no encontraría explicación valida bajo mis criterios, si no se diese una respuesta positiva que pudiera ser en dos vías: una ampliación o un espacio de regularización”, señaló Hernández en conferencia de prensa.
En todo caso, el Gobierno de Honduras tiene que estar preparado para el peor de los casos, recalcó, y “estamos listos”.
“Cada compatriota acogido al TPS, en caso de que fuera una respuesta negativa de parte del Gobierno de Estados Unidos, sepan que Honduras lo va a recibir con los brazos abiertos”, destacó el jefe de Estado.
Se cuenta con un plan agresivo para recibir a los compatriotas que deseen regresar al país una vez se conozca la decisión del Gobierno estadounidense respecto a su estatus legal migratorio, apuntó.
Trabajo
Hernández recordó los esfuerzos de su Gobierno desde que inició esta cruzada acompañando a los compatriotas para lograr la ampliación del TPS o la regularización definitiva de su estatus para convertirse en ciudadanos de Estados Unidos.
“Fuimos muy categóricos con el vicepresidente Mike Pence, no solamente en conversaciones que tuvimos en marzo pasado y con la carta que le entregué”, en apoyo a la ampliación del TPS, acotó.
Asimismo, dijo que abogó para que los más de 57,000 compatriotas gocen de esa ampliación del TPS con el secretario de Estado, Rex Tillerson, y cuando el secretario del Interior y Seguridad era John Kelly, actual jefe de Gabinete de la Casa Blanca.
Añadió que también ha realizado una gran cantidad de reuniones con congresistas y senadores para abordar el tema.
En septiembre pasado, en el marco de la 72° Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas (ONU), al reunirse con el subsecretario de Asuntos Políticos de Estados Unidos, Thomas Shannon, puntualizó los argumentos por los que Honduras pide la ampliación del TPS y de ser posible la regularización definitiva de los nacionales.
“Siento que la mayoría de autoridades estadunidenses han simpatizado con los argumentos de Honduras. Varios de ellos, conocen los antecedentes del país”, señaló.
Asimismo, en el pasado Gobierno del presidente Barack Obama, el vicepresidente Joe Biden le manifestó a Pence que era importante tomar en cuenta los avances alcanzados con el Plan Alianza para la Prosperidad del Triángulo Norte (Honduras, Guatemala y El Salvador).
Le dijo: “vicepresidente Pence, mantenga el contacto con él (presidente Hernández)”, añadió.
Y “yo aproveché para saludarlo (a Pence) y para felicitarlo por las elecciones antes de que tomara posesión, porque el abordaje del Plan Alianza para la Prosperidad tiene que ver con esto del estatus migratorio”, remarcó.
“Una decisión contraria con la ampliación y regularización definitiva va en contra de los principios que sirven de fundamentos para el Plan Alianza para la Prosperidad”, resaltó el gobernante.
Ha sido un año de trabajo intenso en ese tema, no solamente del presidente Hernández, sino del embajador de Honduras en Washington, Marlon Tábora; la canciller, María Dolores Agüero, y la vicecanciller, María Andrea Matamoros, y el ministro coordinador general de Gobierno, Jorge Ramón Hernández Alcerro, así como la participación en las últimas semanas de parte de algunos diputados del Congreso Nacional.
“Los congresistas y senadores han visto un país unido entorno al beneficio de sus compatriotas”, apuntó Hernández.
“Es casi un año de esa ofensiva diplomática, pero no podemos engañarnos: la decisión es de Estados Unidos. Hay que poner los pies sobre la tierra”, recalcó.
“Es una decisión soberana de Estados Unidos el otorgar una ampliación y regularización del estatus migratorio de nuestros compatriotas”, concluyó el presidente de la República.
