TEGUCIGALPA. Al menos siete menores hondureños han sido afectados en la previa al 24 de diciembre por la mala manipulación de productos derivados de la pólvora.
Los últimos tres se trata de un menor de 11 años que ingresó al hospital regional del Sur en Choluteca con lesiones severas en una de sus manos.
Mientras que en la capital, en el Materno Infantil, un jovencito de 15 años también fue ingresado esta madrugada procedente de la colonia Honduras con la mano lastimada producto del estallido de un mortero.
Caso lamentable
Uno de los casos más sorprendentes es el de una niña de apenas 5 años de edad originaria de Nacaome, Valle, a quien un “cuete” le explotó en la boca provocándole daños en la mucosa oral, informó este domingo el Dr. Omar Mejía, director del hospital para Niños Quemados.
El viernes anterior las autoridades hospitalarias daban reporte de un menor de 9 años que perdió dos dedos de la mano izquierda al explotarle un mortero en Guajiquiro, La Paz.
Dari Lenín contó que el petardo (sin mecha) lo encontró en la calle cuando se dirigía a comprar maíz con su abuela. Al manipularlo con un cuchillo le explotó.