Después de diez años consecutivos en los que el Balón de Oro no salía de la hegemonía de Lionel Messi y Cristiano Ronaldo, apareció Luka Modric. El mediocampista del Real Madrid se quedó con la edición 2018 de los premios, luego de una gran temporada en el Merengue y una excepcional participación en el Mundial de Rusia 2018 con la Selección de Croacia.
El trofeo que reconoce anualmente al mejor futbolista del planeta lo entregó la revista France Football este lunes en una ceremonia celebrada en el Grand Palais de París, a la que asistieron muchas de las estrellas del mundo del fútbol, entre las que no estaban Messi ni Ronaldo. Allí, Modric reveló el secreto de su éxito: “Durante toda mi carrera supe bien que solo el trabajo y la confianza en uno mismo permiten exprimir el talento”.
“Lo mejor nunca es fácil. Todo esto no fue fácil. Tuve que aprovechar las oportunidades. Mis padres lo sacrificaron todo por mí cuando era niño. Es gracias a ellos que estoy aquí esta noche”, añadió el croata de 33 años.
“Es una sensación única. Estoy orgulloso. Es difícil explicarlo con palabras, pero quería dar las gracias a todos aquellos que me han permitido estar aquí esta noche”, dijo al recibir el premio. “Cuando eres niño siempre tienes sueños. Los míos eran jugar en un gran club y ganar grandes trofeos. El Balón de Oro era todo lo que podía soñar cuando era niño. Es un honor ganar este premio”, expresó el talentoso volante.
“Increíble” suceder a Ronaldo y Messi
Modric calificó de “increíble” suceder a dos jugadores de la clase de Ronaldo y Messi y haberse impuesto “a tantos grandes jugadores”. “Eso quiere decir que he hecho algo extraordinario este año”, bromeó. “2018 es el año de mis sueños”, insistió.
En una votación entre 180 periodistas internacionales, Modric, finalista de la Copa del Mundo con Croacia y ganador de la UEFA Champions League, se impuso al portugués Cristiano Ronaldo y al francés Antoine Griezmann, que completaron el podio.
Kylian Mbappé se llevó el premio Kopa al mejor jugador de menos de 21 años y superó en las votaciones a Messi, que de esta manera se quedó fuera de un podio que siempre había pisado desde 2007. Mientras que la noruega del Lyon Ada Hegerberg ganó el Balón de Oro femenino, que se entregó por primera vez y se lo dedicó a todas las jóvenes que practican este deporte.