Unos 30 minutos de lluvia bastaron para causar pánico por inundaciones y desprendimiento de árboles en la aldea La Cañada en el extremo sur de Tegucigalpa.
Pobladores relataron que de repente se vino un fuerte aguacero con descargas eléctricas, inundando calles y avenidas de esa zona capitalina.
Sin embargo, el susto fue mayor cuando un enorme árbol cayó sobre vehículos estacionados dejando cuantiosas pérdidas.
Elementos del Cuerpo de Bomberos se presentaron de inmediato para cortar el frondoso árbol y descongestionar las vías de esa populosa aldea.