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Cinco autobuses repletos con 163 connacionales deportados desde México reportaron esta mañana autoridades del Instituto Nacional de Migración (INM) en la zona norte de Honduras.
Entre los hondureños retornados por la vía terrestre se encuentran 48 menores, en un proceso que se ha reactivado tras siete meses de pandemia.
Los autobuses ingresaron a San Pedro Sula a través de la aduana de Corinto, fronteriza con Guatemala,.
El flujo de deportaciones disminuyó un 65.4 por ciento, al cierre del tercer trimestre del 2020 en relación a ese periodo del 2019, según datos del Observatorio Consular y Migratorio de Honduras (Conmigho).
Fueron retornados durante este periodo, 31,321 hondureños, lo que representa una disminución 59,328, comparado con los 90,649 deportados en el mismo periodo de tiempo en el 2019.
Desde los Estados Unidos, regresaron a 12,593 compatriotas, de ellos, 1,320 son menores de edad, mientras que de México retornaron 11,052 migrantes indocumentados, incluidos 1,662 niños.
Se suman 2,000 deportaciones de la reciente caravana de migrantes que partió la semana pasada y fueron detenidos en Guatemala.
En base a estas estadísticas, en la actualidad es México quien lidera las deportaciones con el 58.1 por ciento del total de casos, mientras que las deportaciones desde Estados Unidos equivalen al 40.2 por ciento.
Asimismo, en estos nueve meses se refleja un gran número de menores deportados, que representan un 11.6 por ciento del total.
Los hondureños emigran principalmente por razones económicas, seguido del temor a los brotes de violencia y la búsqueda de la reunificación familia.
Durante el 2019, la Secretaría de Relaciones Exteriores y Cooperación Internacional oficializó 109,185 los hondureños deportados, esa cantidad representó un nuevo récord que no se había registrado en la última década.
