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El Motagua y el Olimpia definen este domingo al nuevo campeón del fútbol de primera división de Honduras.
Una final en la que los segundos están obligados a ganar con una diferencia de tres goles para alzarse con el trofeo y, además, será un duelo de técnicos extranjeros.
Con el uruguayo Manuel Keosseián en el banquillo, los “leones” del Olimpia llegan cuesta arriba al segundo partido de la final, luego de perder en el de ida por 0-2 ante su vecino y eterno rival, el Motagua, que tiene como timonel al argentino-hondureño, Diego Vásquez.
Esta es la octava final que enfrenta a estos dos equipos en la historia del fútbol hondureño, de las que las ‘águilas’ del Motagua han ganado cinco.
En la víspera, el técnico del Motagua dijo a periodistas que espera “no descuidar nada” para que sus jugadores lleguen “bien” al partido de mañana, que se disputará en el Estadio Nacional.
Aunque el resultado marcador del juego de ida es favorable, Vásquez considera que “es imposible” no pensar en la ventaja, pero reconoce que la final del fútbol hondureño todavía “no está definida”.
Vásquez, quien jugando como portero del Motagua ganó cinco campeonatos, ahora busca el cuarto título con el mismo club, pero como entrenador.
El estratega del Olimpia, que busca ganar su campeonato número 31, también tiene claro que la derrota del pasado domingo por 0-2 ante el Motagua no definió nada, solamente se obtuvo una ligera “desventaja”.
Keosseián, muy conocido en Honduras, donde ha dirigido varias veces al Marathón y lo ha hecho campeón, considera que el mayor mérito del Olimpia, al que llegó como su nuevo técnico a finales de octubre, es de sus jugadores porque han creído en ellos mismos.
Si el partido de mañana finalizara 2-0 a favor del Olimpia, la serie se empataría y tendrían que irse a un tiempo adicional de 30 minutos. De persistir el mismo resultado el campeonato se definiría con lanzamientos de penalti.
A la final del torneo Apertura han llegado dos de los cuatro mejores equipos hondureños.
