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Alimentarse con carnes rojas cada vez se convierte en un lujo para la mayoría de hondureños debido a los constantes incrementos que es trasladado al comprador final ante la falta de regulación denunciaron esta mañana asociaciones de consumidores.
Según el presidente de la Asociación para la Defensa de la Canasta Básica de Honduras (Adecabah), Adalid Irías, la carne de res registra un incremento de tres lempiras para el carnicero.
Afortunadamente, este incremento no había sido trasladado al consumidor final por algunos comerciantes conscientes, pero advierten en las próximas semanas la libra de carne de res tendría un aumento en su costo de al menos dos lempiras.
La libra de este producto ya había aumentado tres lempiras. de 65 a 68 lempiras, atribuido al ajuste de salario mínimo, alto costo de concentrados, sequía y secuelas de las tormentas tropicales Eta e Iota.
Otros suman también el costo de energía e impacto de los precios de los combustibles, en especial del diésel. La gasolina en sectores de Olancho ya pasa de los 110 lempiras el galón, debido al acarreo desde las terminales centrales hasta esa zona productiva, entre otros.
El costo se elevaría a 70 lempiras por libra de carne de res, sin embargo, ya se anunciaron sanciones de parte de la Dirección de Protección al Consumidor, que no ven justificación en el aumento desmedido.
Adicionalmente, se alertó que este producto está siendo exportado a Guatemala y presiona una disminución de la oferta nacional en mercados populares.
En el primer semestre la canasta básica en Honduras aumentó su costo en 300 lempiras, principalmente como efecto del alza de los carburantes o derivados del petróleo.
