El joven profesor Rommel Baldemar Herrera Portillo quedó libre esta mañana tras cumplir con una pena mínima y conmutable en una acusación interpuesta por el incendio en la entrada de la embajada de los Estados Unidos en Tegucigalpa en el 2019.
Herrera Portillo fue recibido entre abrazos y muestras de alegría por amigos y familiares, a la salida del Hospital Psiquiátrico Dr. “Mario Mendoza” en Tegucigalpa donde permanecía interno.
El joven fue capturado a finales de mayo de 2019, permaneció cuatro meses privado de libertad en la cárcel de Morocelí, El Paraíso “La Tolva”, en Morocelí y en octubre de ese año, se le cambió la medida de privación de libertad por internamiento en el Hospital Psiquiátrico Dr. “Mario Mendoza”.
La defensa compuesta por Karol Cárdenas del Comité de Familiares de Detenidos Desaparecidos en Honduras (COFADEH) y el defensor privado Omar Menjivar, desvirtuaron que Rommel fuera el iniciador del incendio, sino un participante más en la movilización.
Omar Menjívar, dijo que se sustituyó la pena que debía cumplir en la cárcel por dinero que se pagó al Poder Judicial de Honduras.
Por este delito, el Ministerio Público y la abogada privada de la Embajada pretendían que el joven pagara más de 42 millones de lempiras, pero ayer trascendió que se pagaron 8 mil lempiras por concepto de una conmuta de dos años.