El Gobierno de la República a través de la Cancillería expresó su rechazo categórico a la Lista Engel, publicada recientemente por el Departamento de Estado de los Estados Unidos, “por tratarse la misma de un documento motivado políticamente e injerencista. Honduras es una nación soberana y seguirá defendiendo el principio de no intervención y de autodeterminación de los pueblos”.
Sin embargo, el comunicado es irónico, ya que la presidenta de Honduras, Xiomara Castro, recibió en varias ocasiones en Tegucigalpa a la jefa del Comando Sur de Estados Unidos, la general Laura Jane Richardson, con quien conversó sobre seguridad regional, lucha contra el narcotráfico y cooperación continua.
Según el comunicado de Cancillería “La naturaleza e intención de esta lista, denota una permanente manipulación y una política intervencionista, que muchas veces en el pasado ignoró los motivos que ahora invoca, indicaron las autoridades en una nota aclaratoria”.
“En el gobierno anterior, las publicaciones del mismo documento, Lista Engel, de forma contradictoria, nunca incluyó a personajes como el dictador hondureño, ex presidente Juan Orlando Hernández, evidentemente protegiéndolo, ya que apenas unas horas después de finalizado su mandato, EE.UU procedió acusarlo de narcotraficante y solicitó su extradición”, señala el documento.
Asimismo, asegura que el Gobierno de Honduras está determinado a recuperar el Estado de Derecho, destruido desde el 28 junio del 2009, y revertir ampliamente el Golpe de Estado, que ya la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), lo reconoció como un ilícito internacional.
“Rechazamos categóricamente las acciones y despropósitos de esta publicación, que constituyen de forma inequívoca en un intento por validar ese crimen y desconocer que nos impuso una narcodictadura, que oprime y persigue implacablemente a compañeros mencionados injustamente en esta lista, quienes todavía este día, siguen pagando el alto costo por defender nuestra democracia”, apunta.
“Seguiremos manteniendo nuestra política de apertura democrática, en el marco del respeto mutuo, y la observancia irrestricta del derecho internacional”, reitera.