La investigadora de la Universidad Católica de Honduras (UNICAH), María Milla, lamentó que la población no está acatando las medidas de restricción para evitar la propagación del COVID-19.
Las personas salen de manera descontrolada a la calles, muchas de ellas sin usar mascarilla, mucho menos el distanciamiento físico.
Por este comportamiento negativo, los hospitales del país han reportado un incremento de atenciones a personas positivas del virus.
“Prácticamente nadie está haciendo mucho caso de la restricción, pero hay algunos puntos de chequeo del número de identidad y con eso controlan un poquito la circulación, dijo.
“Al eliminar esa restricción no me quiero imaginar como va a ser la desbandada que vamos a tener”, manifestó.
La mesa multisectorial levanto las restricciones de circulación del miércoles 4 al domingo 8 de noviembre, en el marco de la celebración de la Semana Morazánica.
Sin embargo, se recomienda el adecuado uso de la mascarilla, el lavado y desinfección de manos y cumplir con el distanciamiento físico, solo así se va a detener la propagación del virus que ya ha cobrado la vida de más de 2,600 hondureños.
Hospitalizaciones
Milla destacó que el sistema de salud se ha fortalecido y el comportamiento del virus da para tratar a las personas que lo requieren.
“El 80 por ciento de los casos se ha podido manejar en casa, pero hay un costo adicionado a eso, no todo el mundo puede pagar ese manejo”, expresó.
“Vemos que nos hemos enfocado en la atención de los hospitales, pero debemos fortalecer la red primaria de salud”, indicó.
Los centros hospitalarios reportan una capacidad de entre 80 y 90 por ciento de desocupación para pacientes COVID-19.
Esto se debe a la instalación de centros de estabilización para el virus en casi todos los 298 municipios, así como las brigadas medidas y los tratamientos MAIZ entregados a personas sospechosas.