La Iglesia de Inglaterra “coludió” y ayudó a esconder los abusos sexuales a jóvenes cometidos durante años por uno de sus ex obispos, dijo el jueves el arzobispo de Canterbury.
La declaración de Justin Welby, máximo responsable de la iglesia anglicana, coincide con la publicación de un informe en el que la institución revisa la gestión del caso del ex obispo Peter Ball, que fue condenado y encarcelado en 2015 tras declararse culpable de abusos, incluyendo dos cargos por asalto indecente.
Según Welby, el reporte fue una “lectura desgarradora” y la iglesia no ayudó a los que no fueron lo suficientemente valientes para denunciar.
El informe dice que la conducta de Ball “causó daños graves y duraderos a la vida de muchos hombres”, y que “la iglesia, a sus niveles más altos y durante muchos años, lo apoyaron de forma imprudente”.
(Fuente: EL Comercio)