Personal asignado al Hospital de Aislamiento Móvil de San Pedro Sula, Cortés en la zona norte de Honduras, comenzó desde esta mañana, la atención de pacientes con COVID-19, como urgía la población en general.
Los pacientes fueron ingresados a bordo de ambulancias del Sistema de Emergencia Nacional 911, desde el Hospital Mario Catarino Rivas, colindante con los nuevos módulos de asistencia médica,
Las nuevas instalaciones con capacidad para albergar a 66 pacientes, fueron sometidas a trabajos de acondicionamiento durante tres meses, después de llegar al país, en julio pasado.
Mientras, el Hospital Mario Catarino Rivas que llegó a tener 70 pacientes con COVID-19 en un solo día, ayer registraba a 28 personas hospitalizadas.
“Esta nueva unidad tiene condiciones óptimas para atender a pacientes en estado grave de las unidades de cuidados intermedios y que necesiten ventilación mecánica, así mismo los usuarios de la unidad de cuidados intensivos”, destacó el viceministro de Salud, Roberto Cosenza.
Inversiones Estratégicas de Honduras (Invest-H) adquirió siete Hospitales de Aislamiento Móviles en Turquía, por 47 millones de dólares (L1,150 millones), dos llegaron a Puerto Cortés el 10 de julio, uno para operar en Tegucigalpa y otro en San Pedro Sula.
En el hospital móvil de Tegucigalpa avanzan las pruebas de los sistemas, en la meta de que entre en operaciones a finales de este mes, de acuerdo con miembros de la junta interventora de Invest-H.
Entre tanto, los hospitales para Santa Rosa de Copán y Choluteca que arribaron el domingo a Puerto Cortés, están en el proceso de verificación por parte del Ministerio Público, previo a la movilización a los respectivos lugares para instalarlos.
Los tres hospitales restantes estaban listos, esta semana para subirlos al barco en el puerto de Estambul, Turquía, rumbo a Honduras. Su arribo a Cortés se estima tras 20 a 25 días de navegación.