TEGUCIGALPA. Cada 1 de septiembre se celebra el Día de la Bandera Nacional, uno de los máximos símbolos nacionales de Honduras. Pensar en la Bandera es tener presente esa independencia nacional en su relación con valores cívicos como la fraternidad y unidad, entre todos los habitantes.
La bandera de Honduras fue creada el 16 de febrero de 1866 durante el Gobierno del presidente de la República en ese entonces, don José María Medina. Por decreto número 7 emitido por el Congreso Nacional se estableció que el pabellón nacional debe constar de tres franjas iguales y horizontales, la superior y la inferior de color azul turqueza, y la del centro, blanca, con cinco estrellas del mismo color azul turqueza en el centro.
Las franjas azules representan el cielo hondureño al igual que los océanos Atlántico y Pacífico, los cuales bañan las costas del este y el oeste del país. La franja blanca simboliza la meta a donde deben dirigirse las buenas acciones de cada uno de los hondureños como ser la pureza, la integridad, la fe, la obediencia, la paz, la firmeza y la bondad; las cinco estrellas representan a los cinco países que formaron la antigua Federación Centroamericana.”
Actos oficiales
Este año los actos oficiales iniciaron con la izada de la Bandera Nacional y con varias instituciones de Gobierno, miembros de misiones diplomáticas, entre otros. Dicha actividad se celebró en las instalaciones de Casa Presidencial y fue encabezada por la designada presidencial, María Antonia Rivera.
La funcionaria indicó que “ahora estamos iniciando la celebración del 198° aniversario de independencia y estamos en cuenta regresiva hacia el bicentenario y, por lo tanto, es el momento de redoblar esfuerzos y seguir construyendo la nueva Honduras”. En actos cívicos se izó el pabellón nacional y se incineraron los sacados de uso como manda la tradición cada primero de septiembre.