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Un total de siete defensores campesinos, de la tierra y el agua, fueron asesinados en los primeros 43 días de 2023 en el Bajo Aguán, según las organizaciones denunciantes.
Recientemente, la Plataforma Agraria y las Organizaciones Populares del Aguán (COPA) denunciaron el asesinato del defensor campesino Santos Hipólito Rivas y su hijo Javier Rivas.
El crimen lo condenó la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (Oacnudh).
El doble asesinato se produjo en una comunidad de la ciudad de Trujillo, departamento de Colón, en el Caribe de Honduras.
Las víctimas se transportaban en una motocicleta, según un comunicado de la Plataforma Agraria y la Copa, cuando fueron atacados.
Santos Hipólito Rivas, fundador de la empresa campesina Gregorio Chávez, tenía medidas de protección interna del Mecanismo de Protección desde el 28 de marzo de 2019.
Gobierno de incapaz
Sin embargo, el Estado y gobierno de Honduras liderado por la presidente Xiomara Castro ha sido “incapaz de proteger a los y las defensoras de la tierra y el agua en el Aguán”, en el Caribe hondureño, señalan las organizaciones.
El defensor campesino denunció en varias ocasiones que “era víctima de amenazas, persecución y vigilancia por miembros del grupo armado que lidera alías “Piturro”, que opera a lo interno de la finca Paso Aguán desde hace varios años, situación que es de conocimiento de las autoridades de la región”, destaca el documento.
El 25 de junio de 2019 la comunidad de Panamá junto a la Plataforma Agraria presentó una denuncia ante el fiscal general de Honduras, Óscar Chinchilla, contra el grupo armado que opera en la finca Paso Aguán.
“Nos preocupa que criminales involucrados en asesinatos entre los años 2010 y 2013 han regresado a la zona y se han integrado al grupo armado que lidera alias ‘Piturro'”, según la información de las organizaciones campesinas.
Fiscalía
Exigen también “la intervención urgente” de la Fiscalía de Crímenes Contra la Vida para que se inicie una investigación “inmediata y exhaustiva” que lleve a la captura de los responsables del doble asesinato.
El asesinato del campesino y su hijo fue condenado “enérgicamente” por la Oacnudh, que instó a las autoridades de Honduras a realizar una “investigación pronta, imparcial y exhaustiva” y que considere su labor de defensor.
Solicita, además, a Honduras que esclarezca las causas de la muerte violenta de ambas personas, y que tomé “medidas urgentes” para prevenir más asesinatos en el Bajo Aguán, que desde 2009 es escenario de enfrentamientos entre campesinos y terratenientes.
La Oacnudh pide también a Honduras instalar una Comisión Tripartita prevista en los acuerdos firmados con las cooperativas agrarias en febrero de 2022.
