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Las fuerzas policiales lanzaron este domingo cientos de bombas Lacrimógenas para dispersar a los grupos de la oposición política que exigen la salida del poder del presidente de Honduras, Juan Orlando Hernández.
“Demasiado criminal ha sido la represión. Si la toma de calle ya se levantó por qué siguen reprimiendo”, denunció el derrocado expresidente hondureño Manuel Zelaya (2006-2009).
“No reconocemos un gobierno surgido de la usurpación”, dijo Zelaya mientras era afectado por los gases lanzados por la Policía Nacional.
“Las protestas van a continuar en la medida que el gobierno no de elecciones nuevas”, añadió el también coordinador del Partido Libertad y Refundación (LIBRE).
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“El pueblo necesita un gobierno justo, no una dictadura”, afirmó Zelaya.
“Como avispas empezamos a crear una escalada de movilizaciones hasta que lleguemos a un paro nacional hasta que caiga la dictadura”, indicó.
Desde tempranas horas, miles de opositores bloquearon vías en diferentes zonas de Honduras en la llamada protesta de “chalecos rojos”.
Protesta
Al grito de “Fuera JOH (Juan Orlando Hernández)”, los manifestantes, portando mantas y pancartas con esa leyenda, fueron sitiados por contingentes policiales que los desalojaban.
Sin embargo, los protestantes se trasladaban a otros sitios para hacer las hogueras con los neumáticos de automóviles.
Hernández asumió el 27 de enero del 2018 después de ser reelegido en unas controversiales elecciones en las que una alianza opositora coordinada por Zelaya denunció fraude y salió a manifestar en reclamo de la victoria de su candidato, el popular presentador de televisión Salvador Nasralla.
El tribunal electoral declaró ganador a Hernández casi un mes después de celebrados los comicios, en medio de las protestas también debido a que la Constitución prohíbe la reelección, pese a lo cual lanzó su candidatura por el derechista Partido Nacional (PN, derecha) tras una interpretación del poder Judicial controlado por el oficialismo.
Las protestas de este domingo han paralizado parcialmente algunas actividades del país, con muchas negocios cerrados y familias que han preferido no salir de sus casas.
