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El proyecto “Desarrollo de Capacidades para Sistemas de Innovación Agrícola” (CDAIS, por sus siglas en inglés), desarrolla una serie de actividades para fortalecer las capacidades de 25 facilitadores que acompañan los nichos de frijol, papa, cacao y café en Honduras y aguacate, cacao, frijol y miel, en Guatemala.
El equipo de facilitadores participó en el taller con el objetivo facilitar los procesos de innovación dentro de los nichos mencionados, revisar, evaluar y apropiarse del plan de acompañamiento a los nichos que se ejecutará en la última etapa del proyecto.
Myra Wopereis, coordinadora global del proyecto CDAIS basado en Francia y quien participa en la actividad realizada en la ciudad de Guatemala expresó: “la innovación constante en los sistemas agrícolas es imperativa, pero no se genera de manera espontánea. En los países en desarrollo es muy importante brindar acompañamiento y fortalecer las capacidades de los actores que participan en la cadena de valor”.
La coordinadora comentó que este proceso se está llevando a cabo en ocho países del mundo, entre ellos Honduras y Guatemala, a fin de fortalecer y desarrollar capacidades funcionales en los actores de los nichos que promueva de manera sostenible la innovación agrícola, en respuestas de las necesidades identificadas en cada una de ellos.
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Durante los últimos 30 años las economías tropicales han crecido más rápido que el resto el mundo. También ha aumentado su población y la degradación ambiental. Aunado al impacto del cambio climático, el CDAIS promueve una agricultura sostenible basada en innovación. El proyecto CDAIS es una iniciativa de la Plataforma de la Agricultura Tropical (TAP), financiado por la Unión Europea. En Guatemala está siendo implementado por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), AGRINATURA y el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Alimentación.
Materia prima: capital humano
El proyecto se enfoca en el capital humano. En Guatemala, los nichos con los que trabaja el son aguacate, cacao, frijol y miel. En este último se coordina directamente con la Cooperativa Integral de Producción Apicultores de Cuilco, en Huehuetenango, que aglutina a 140 socios activos y cuentan con 5,800 colmenas para producción de miel.
“Cuando empezamos a trabajar solo teníamos una mirada hacia nuestro nicho o cooperativa. Pero, a partir de la participación en el proyecto reactivamos la Comisión Nacional Apícola (CONAPI), que hoy la conforman 13 organizaciones dedicadas a la producción de miel” comentó William Velásquez Anzueto, técnico de producción de CIPAC y que participa en la las actividades de fortalecimiento de capacidades que se han realizado durante esta semana.
Producen un aproximado de 3,700 quintales de miel que exportan a países como Suiza, Estados Unidos, Inglaterra y Alemania. Sin embargo, Velásquez Anzueto indica que quieren expandirse al mercado local.
“Queremos que nuestra gente tenga el beneficio de la miel, reconocida por su calidad. Es un producto que debemos consumir, especialmente para enfrentar problemas de desnutrición y para fortalecer la seguridad alimentaria y nutricional de los compatriotas” indicó el productor de miel.
Héctor García, del proyecto de Papa Sana de la Dirección de Ciencia y Tecnología Agropecuaria (DICTA) de Honduras, y facilitador que participa en el taller manifestó que “me gusta el enfoque de CDAIS porque crea capacidades funcionales para facilitar espacios donde evaluamos necesidades y potencia habilidades de colaboración y reflexión para favorecer la toma de decisiones en bien de los productores y actores involucrados”.
La producción de papa en Honduras que se concentra en la zona occidental y se utilizan unas 2,900 manzanas para su cultivo cada año.
Los nichos de los productos con los que trabaja el CDAIS fueron elegidos por los países en base a diez criterios específicos, entre los que se encuentran: alineación con prioridades nacionales, la inclusión y empoderamiento de jóvenes, mujeres y personas de recursos limitados y parte de un sector insuficientemente atendido entre otros.
“Para desarrollar un sector necesitas la gente adecuada, con las capacidades adecuadas. Que sea capaz de catalizar el cambio y que tenga el compromiso de hacerlo. Tiene que tener una mente abierta al cambio y promovemos ese tipo de actitud hacia la innovación en los sistemas agrícolas de los ocho distintos países en los que trabajamos” explicó Wopereis.
La coordinadora global comentó que si bien se inició con un buen pie en Centroamérica al anclarse a cadenas de valor, no es suficiente.
“Hemos promovido esta red de facilitadores que trabajarán con las cadenas pero debemos fortalecer aún más el acercamiento de ellos con otros actores relevantes como lo son socios, autoridades de gobierno y agencias de cooperación” dijo Wopereis.
El proyecto CDAIS se ejecuta en Angola, Bangladesh, Burkina Faso, Etiopía, Honduras, Guatemala, Laos y Ruanda.
