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Las autoridades del Servicio Nacional de Emprendimiento y Pequeños Negocios (Senprende) realizó este lunes el lanzamiento y presentación del proyecto que tiene como objetivo capacitar en educación financiera a sectores vulnerables del país.
Se trata del proyecto Iniciativas Escalables para la Generación de Capacidades Financieras y Empresariales, y Acceso al Sistema Financiero.
En la actividad, que se realizó en la ciudad de Gracias (Lempira), se presentaron los resultados preliminares de las primeras 20.000 familias capacitadas y focalizadas por el programa del Bono Vida Mejor.
La primera dama, Ana García de Hernández, también participó en la actividad junto al mandatario.
Una de las mujeres capacitadas por medio del programa es Brenda María Hernández, que luego de pasar por diversos problemas económicos en Marcala (La Paz), junto a su esposo ahora han podido acceder a financiamientos blandos y capacitación financiera para mejorar sus condiciones de vida.
“Gracias a Dios, y a usted señor presidente, ya tengo dos negocios y cuento con seis empleados.
Aquí en Honduras tenemos todo para poder trabajar con nuestros negocios. Hay educación financiera y financiamientos a baja tasa de interés; no tenemos necesidad de emigrar para otro país”, dijo muy emocionada.
Luego con voz muy firme, pero al borde del llanto dijo: “Señor presidente, usted cambió mi vida y la de mi esposo. Ahora tenemos dos negocios y hasta hemos generado empleos; incluso la pandemia no nos ha afectado, y gracias por este aporte que hemos recibido, porque nos ha permitido generar recursos que antes no teníamos”.
Ángela Castro, también beneficiaria del programa, recordó que empezó con 1.500 lempiras, con una pulpería, y hoy puede ver que está creciendo al aprender a ahorrar y utilizar el dinero en mejor forma “Por ejemplo, solo hoy vendí 400 lempiras en la mañana, y eso dice que podemos levantarnos y sacar adelante a nuestras familias y Honduras”, dijo con voz muy emocionada.
María Orbelina Amaya, otra de las beneficiarias, reconoció que por medio de la tecnología “nos dimos cuenta de que sí podemos emprender un negocio; con una parte del bono, dejé un poquito para emprender mi negocio de venta de pan y tamales, y ahora puedo decir que me ha cambiado la vida”.
