El diputado por el partido Unificación Democrática (UD), Mario Noé Villafranca, entregó al ministro de la Presidencia, Ebal Díaz, el decreto legislativo 2318, mediante el cual el Congreso Nacional aprobó la construcción de un hospital o instituto para atender a los pacientes con cáncer más pobres de Honduras.
El decreto será analizado por el Poder Ejecutivo con miras a su sanción, con el fin de poder buscar los recursos a través de la Secretaría de Finanzas.
Villafranca, quien es un reconocido médico oncólogo, detalló que se entregó el decreto 2318 al Poder Ejecutivo para crear un hospital o instituto del cáncer hondureño, así como una carta de intención por 80 millones de euros, equivalentes a 96 millones de dólares, por parte de un país de Europa.
Puntualizó que ese país de Europa, al que no identificó, ya tiene la carta de intención para financiar el proyecto, que será en una modalidad de pagos semestrales por 10 años, con 1.25 por ciento de interés y con un período de gracia mientras se construye el inmueble.
El estudio de factibilidad tomará entre tres a cuatro meses, para posteriormente comenzar con la construcción del hospital, que podrá tomar un tiempo de hasta tres años, pormenorizó.
Especificó que el proyecto es denominado “llave en mano”, que consiste en la construcción y el aseguramiento del equipo hospitalario.
Villafranca clarificó que ese país de Europa “no está interesado en la contraparte de los 20 millones de lempiras que fueron aprobados (por el Congreso para la etapa previa), sino que hará los estudios de factibilidad, lo que se traduce en un ahorro para el pueblo hondureño y será pagado después de los tres años de su construcción”.
“Le agradecemos al presidente Hernández por la disposición de hacer realidad un sueño anhelado para los pacientes de cáncer”, apuntó.
En el hospital, los procedimientos, tratamientos y operaciones serán gratuitos, recalcó.
El parlamentario afirmó que con esta obra “los hondureños en general y los pacientes con cáncer podrán tener su hospital”, que será principalmente para los “pobres”, que ya no tendrán que gastar en tratamientos.
Villafranca destacó el interés del mandatario Hernández de poder echar andar el proyecto, que es de beneficio de los hondureños.
Asimismo, dijo que está a la espera de la sanción del gobernante y de que luego se giren las instrucciones pertinentes para comenzar con la construcción del hospital oncológico.
Venia del presidente
La iniciativa que se deriva de la promesa realizada por el diputado Villafranca “es bien recibida por el presidente Hernández. De antemano le ha manifestado su voluntad para construir ese hospital”, señaló el ministro de la Presidencia.
“Nos alegra que estas iniciativas vengan al Poder Ejecutivo, porque son orientadas a beneficiar a la población”, resaltó Díaz.
Los costos financieros serán estudiados para aprobar los presupuestos, aseguró el alto funcionario del Ejecutivo.
“Estamos seguros de que vamos a tener la venia para construir el hospital”, apuntó.
El proyecto llevará un período estimado de tres años, una vez iniciada la obra, por lo que será entregado al finalizar el período de este Gobierno, precisó.
Ejemplificó el caso del Centro Cívico Gubernamental, que llevó casi todo el Gobierno anterior (2014-2018), hasta que se pudo echar a andar el proyecto.
“Les puedo asegurar la voluntad y compromiso del presidente Hernández en apoyar la iniciativa del diputado Mario Noé Villafranca para beneficio del pueblo hondureño”, remarcó.
Este tipo de alianzas y diálogos políticos “son los que el pueblo hondureño espera. Este tipo de propuestas son las que construyen y las que queremos todos”.
Díaz felicitó al Congreso Nacional por la aprobación de ese decreto, y ahora “lo que nos toca ahora en el Ejecutivo es ponerle carne, con la parte financiera y de análisis”.
“El presidente Hernández, los compromisos que asume, los cumple”, reiteró el ministro de la Presidencia.
Lo que tendrá el hospital oncológico para los pobres
– Áreas de cirugía y radioterapia
– Acelerador lineal
– Braquiterapia
– Quimioterapia
– Hormonoterapia
– Medicina nuclear (para pacientes operados de cáncer de tiroides bien diferenciado, papilar o folicular), que solo son atendidos en dos hospitales privados.
– Yodoterapia
– Se podrán hacer estudios para saber si los pacientes son resistentes a algún tipo de quimioterapia y así poder tener cuidados intermedios quirúrgicos e intensivos y manejar la cirugía ambulatoria.
– El hospital oncológico para los pobres tendrá la capacidad para atender 100 pacientes nuevos, con igual número de camas.
– Se realizarán entre 200 a 250 cirugías por semana, para contabilizar entre 800 cirugías entre menores y mayores.