Directivos la empresa privada de Tegucigalpa exigieron a la Comisión de Transición que no restrinja la libre circulación de personas este próximo 27 de enero durante la toma de posesión de la Presidenta electa Xiomara Castro de Zelaya, porque eso afectaría el desarrollo económico de la capital.
“Es una fiesta cívica, pero no es un día de feriado nacional”, refirió el director ejecutivo de la Cámara de Comercio e Industrias de Tegucigalpa (CCIT), Rafael Medina.
Mediante un comunicado trascendió que no se permitiría la circulación de vehículos en Tegucigalpa, desde las 6:00 de la mañana hasta las 6:00 de la tarde, para lograr mayor seguridad al desplazamiento de los altos dignatarios y delegaciones asistentes.
Rafael Medina coincidió en que varias zonas de la ciudad se vean restringidas y militarizadas por la seguridad de la nueva presidenta e invitados. “Creo que cerrar la ciudad capital esa una medida absolutamente extrema que no debe de darse”, agregó.
“Habrá zonas que, si deben ser cerradas, sin embargo, creemos que evitar la circulación de vehículos en la ciudad paraliza totalmente el principal polo de desarrollo del país”, insistió.
Las medidas de restricción afectaría la movilización de colaboradores en la banca nacional y al comercio, además de dificultar la atención médica para las personas que lo necesiten y se paralizaría toda actividad socio económica de los diferentes sectores que convergen en la capital hondureña.