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Elsa Palou, coordinadora de la Junta Directiva del Hospital Escuela Universitario (HEU), dejo en claro que “el que no puede pagar no pagará ni un centavo”.
Esto en relación al aumento anunciado recientemente por las autoridades de ese centro asistencial sobre los precios de los servicios médicos.
No obstante se quejó que el Estado no cumple con la función constitucional de darle a los hospitales lo que necesitan para poder funcionar.
Si el Estado diera todo, no habría necesidad de cobrarle a nadie y si se hace es porque así lo dice la Ley. En tal sentido el reglamento dice que cada hospital deberá fijar las cuotas de recuperación, indicó
Asimismo recordó que de acuerdo al cálculo de presupuesto hecho por la misma Secretaria de Finanzas. Al HEU deberían asignársele más de 2,000 millones de lempiras pero solo se le asignó 1,437 millones, lo que indica un déficit que ronda los 700 millones de lempiras.
Palou se preguntó el por qué el Hospital Escuela Universitario no tiene acceso a la tasa de seguridad si es allí donde se atiende a la mayor parte de las víctimas de la violencia.
“Nadie sabe en qué se gasta y por qué hay cada vez más anuncios y menos medicinas en los hospitales”, señaló.
Argumentó que la decisión que tomaron la hicieron con base en el reglamento de cuotas recuperadas que data de los años 80. La que define lo que se puede cobrar en los hospitales públicos y en qué se deben invertir esos fondos.
Reconoció que los 28 hospitales públicos de Honduras tienen cuota de fondos recuperados. Y que precisamente el Hospital Escuela es de los que menos cobra.
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Actualmente el HEU recauda alrededor de 2.5 millones de lempiras al mes, que son destinados para la compra de medicamentos de las personas que van a consulta externa.
Asignación del Estado solo ajusta para cuidados intensivos y emergencias
Al parecer, lo que el Estado hondureño asigna solo alcanza para los pacientes de cuidados intensivos, emergencia y parte de los hospitalizados.
Explicó que, en el 2016, el Hospital apoyó con 44 millones de lempiras a las personas de escasos recursos para compra de clavos, placas, de medicamentos que no están en el cuadro básico y que son muy caros y que se ocupan para patologías específicas.
Pese a la decisión tomada, Palou fue contundente al expresar que como siempre ha sucedido y seguirá sucediendo en el HEU.
El Hospital Escuela atiende personas de todos los sectores, pobres, muy pobres, de clase media, media alta y alta.
Según Palou, no se justifica que personas con buenos ingresos, después de estar en cuidados intensivos, por uno o más meses, solo tengan que pagar 200 lempiras.
El que puede pagar que lo haga y con eso se subvenciona al más pobre, al que apenas llegó con el pasaje al Hospital Escuela, sostuvo.
