Por: Fredy Perdomo
Lo más probable es que JOH termine “durmiendo” a la dirigencia del transporte y todo un pueblo quede decepcionado por haber soñado con una justa rebaja de unos 20.00 lempiras al galón de carburantes.
JOH es portador de un alto ego y para él sería más satisfactorio que digan que le ganó la partida a los transportistas, y no que el pueblo por fin le ganó una batalla.
Y un arreglo con la dirigencia del transporte es muy posible, dado que sus líderes son miembros activos de los partidos tradicionales que arrastran rencor por no haber ocupado puestos importantes en el actual gobierno, y la situación se presta para que sean tomados en cuenta.
El gobierno en el marco de su estrategia ha lanzado públicamente un estribillo manipulador, preguntando qué cuánto le rebajará a la tarifa, si el Estado accede a eliminar gran parte de los impuestos que aplican a los combustibles.
Lo cierto es que ante la negativa del gobierno de ajustar las tarifas a los transportistas, estos pidieron la rebaja de los inflamables para desistir de un incremento, y equilibrar sus costos comprando combustibles menos caros.
Sin embargo, los estrategas del gobierno siguen tratando de manipular esta visión de los transportistas, para hacerlos quedar mal ante la población.