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La Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC), por sus siglas en inglés del Departamento del Tesoro de los Estados Unidos, sancionó a Yulan Adonay Archaga Carias alias “Alexander Mendoza” alias “Porky”.
Un líder pandillero de la MS-13 con sede en Honduras, y David Elías Campbell Licona alias “Jorge Eduardo Perez Paz”, un socio de la MS13 con sede en Nicaragua; de conformidad con la autoridad de la organización criminal
transnacional.
Los dos están profundamente involucrados en el tráfico de drogas, violencia, asesinato, extorsión y lavado de dinero.
El Programa de Recompensas contra Delincuencia Organizada Trasnacionales del Departamento de Estado de los Estados Unidos también anunció una recompensa hasta 5 millones de dólares por información que conduzca al arresto o a la condena de Yulan Adonay Archaga Carias.
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“El objetivo de las Sanciones del Departamento del Tesoro contra la MS-13 es interrumpir el uso del sistema financiero de esta organización para lavar los ingresos ilícitos de sus actividades criminales”, dijo el Subsecretario para Terrorismo e Inteligencia Financiera del Departamento del Tesoro Brian E. Nelson.
“La MS-13 es una fuerza violenta y desestabilizadora que amenaza la seguridad de los ciudadanos en América Central y cuyas actividades ilícitas deterioran la economía legitima de la región, a tal grado que sus ciudadanos están siendo forzados a salir de la región en busca de seguridad y mejores oportunidades en otros lugares”.
La acción de hoy es también apoyada por la Fuerza de Tarea Conjunta Vulcan y el Comando Sur de los Estados Unidos.
MS-13 el Porky
En octubre de 2012, la MS-13 se convirtió en la primera pandilla callejera trasnacional tras ser designada por el Departamento del Tesoro como una organización criminal trasnacional.
La MS13 lleva sus actividades ilícitas a los Estados Unidos y alrededor del mundo. Las actividades criminales de la MS-13 incluyen tráfico de personas, explotación sexual, tráfico de narcóticos, homicidio, asesinatos, crimen organizado, chantaje, extorsión y violación a las leyes migratorias.
Las actividades delictivas de la MS-13 han ayudado a convertir a Guatemala, El Salvador y Honduras en una de las regiones más violentas del mundo.
El control de violencia de la MS-13 en América Central es una de las razones que obliga a miles de migrantes a huir a los Estados Unidos.
Los migrantes del triángulo norte – Guatemala, Honduras y el Salvador – han ido en las muy publicitadas caravanas hacia la frontera sur de los Estados Unidos para huir de la violencia y la pobreza.
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