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La oficina de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) lanzó una campaña en contra de indocumentados y ciudades santuario, en la cual 10 de los 14 “más buscados” que destaca son latinos.
El plan “Declined detainers” (“Detenciones declinadas”) se lanzó el pasado viernes con vallas publicitarias en Pensilvania, donde se exhiben los rostros de inmigrantes indocumentados buscados por la agencia.
Las vallas exponen a infractores de inmigración, que según el ICE “pueden representar una amenaza para la seguridad pública”.
“Estas personas fueron previamente arrestadas o condenadas por delitos en Estados Unidos, pero fueron liberadas en la comunidad en lugar de ser transferidas a la custodia del ICE de conformidad con una orden de detención migratoria”, dijo la agencia en un comunicado.
Entre los inmigrantes expuestos está el hondureño Marcelino García Bonilla, a quien las autoridades migratorias buscan por su presencia indocumentada en el país.
García Bonilla cuyo caso pertenece a la jurisdicción de la ciudad de Nueva York y tiene un historial delictivo por asalto con intención de causar daño físico en tercer grado, y acoso con contacto físico en segundo grado.
Asimismo, en la lista se encuentra el ecuatoriano Lauro Peralta-Veles, de 51 años.
El ICE destaca que Peralta-Veles fue arrestado por el Departamento de Policía de Pittsburgh el 20 de junio por agresión agravada, intoxicación en vía pública, resistencia al arresto y alteración del orden público.
La agencia federal presentó una petición de detención en la cárcel del condado de Allegheny, pero debido a las leyes de santuario vigentes en esa área el pedido no fue respetado y el sujeto fue liberado, argumenta la agencia.
“Con demasiada frecuencia, las políticas de santuario que limitan la cooperación con el ICE dan como resultado importantes preocupaciones de seguridad pública”, dijo Tony H. Pham, quien desempeña funciones de director del ICE.
La acción de la agencia se da a unos días de que saliera a la luz un plan del ICE para hacer operativos selectivos en ciudades “santuario”. El plan, desvelado por el diario The Washington Post, se llevará a cabo durante el mes de octubre y comenzaría en California.
Se prevé que las acciones del ICE se expandan a ciudades como Denver y Filadelfia, según dos funcionarios, que hablaron con el rotativo bajo condición de anonimato.
Activistas y defensores de los inmigrantes han catalogado las acciones como una acción política en favor del presidente Donald Trump a un mes de las elecciones del 3 de noviembre
“Este es una movida enteramente política”, dijo Pablo Alvarado, director de la Red Nacional de Jornaleros, organización que promovió las leyes que convirtieron a California en estado santuario.
“Trump quiere motivar a sus bases xenófobas y racistas para que no se queden en casa el 3 de noviembre. Es simplemente una estrategia electoral que va a causar mucho dolor y sufrimiento a nuestra gente indocumentada”, insistió Alvarado.
Por su parte Pham subrayó que “el ICE continuará haciendo cumplir las leyes de inmigración establecidas por el Congreso a través de los esfuerzos de sus agentes para expulsar a los delincuentes extranjeros y hacer que nuestras comunidades sean más seguras”.
