El gobierno de Estados Unidos, que informó que una vez concluido el plazo fijado por un juez de San Diego para reunir a 2.500 menores, de entre 5 y 18 años, separados de sus padres inmigrantes indocumentados en la frontera con México bajo la política antiinmigración de tolerancia cero, aún mantiene a 700 bajo su custodia.
Por su parte, los abogados del Gobierno señalaron en un informe remitido a un tribunal de San Diego, California, que han devuelto a sus padres en centros de detención a 1.442 menores, mientras que otros 378 han sido liberados en “circunstancias apropiadas” y entregados a padres que ya no estaban bajo custodia o algún otro familiar.
El Gobierno de Donald Trump cifraron en 711 el número de menores cuyos padres no cumplen los requisitos para una entrega en condiciones seguras. En este caso figuran 431 hijos de padres que ya no están en el país y otros 120 menores cuyos progenitores han renunciado al beneficio de la reunificación familiar. En este grupo de los no elegibles figuran también 67 hijos de padres que representaban un riesgo por sus antecedentes penales, 79 menores cuyos progenitores han sido liberados de la custodia de la Oficina de Inmigración y Aduanas (ICE) y 94 que están a la espera de confirmar la ubicación de los padres.
PLAN DE REUNIFICACIÓN
“El plan de reunificación presentado a la corte está avanzando, y se espera que resulte en la reunificación de todos los miembros de la demanda colectiva que son elegibles para reunificación”, señala el informe entregado al tribunal.
El juez Dana Sabraw, de San Diego, ordenó a la Administración de Donald Trump entregar antes del 27 de julio, a 2.551 menores de edades entre 5 y 18 años que fueron separados de sus familias este año a consecuencia de la política de “tolerancia cero” hacia la inmigración ilegal. Por su parte, el Gobierno acortó esa lista a 1.634 menores, que son los que considera “elegibles” para la reagrupación familiar ordenada por Sabraw, quien está a cargo de una demanda planteada contra las autoridades de migración por parte de la Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU).