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La morgue del Ministerio Público (MP) en Tegucigalpa, capital de Honduras, guarda en sus congeladores 40 cadáveres que no han sido reclamados por familiares por diferentes razones, entre estas, la crisis económica que afecta a las familias de este país centroamericano.
Los gastos para ataúd, transporte, sala velatoria, terreno y el entierro tiene un costo mínimo de 25 mil lempiras ($1,000), eso incluye lo básico que presta una funeraria, señaló Mario Rodríguez, una de las personas que ofrece este servicio en alrededores del capitalino, Hospital Escuela.
Entre tanto, los costos más cómodos para familias de escasos recursos rondan los 5,000 lempiras ($204), sin incluir el pan, café y la comida que se acostumbra a regalar por las noches a personas que acompañan los velatorios.
La portavoz de esa dependencia, Issa Alvarado, confirmó que entre los cuerpos en el abandono, muchos están plenamente identificados, otros son desconocidos y para una parte se esperan resultados de ADN debido a que no se pudo conocer su identidad por otros métodos científicos por medio de huellas dactilares y odontograma.
La alta concentración de cadáveres, explicó, se debe a que la morgue capitalina recibe traslados de todo Francisco Morazán, Siguatepeque, Comayagua, La Paz, Olancho, El Paraíso y Choluteca.
En esa sala se practican autópsias de víctimas de la violencia, suicidios o casos que demandan de una investigación judicial, mientras las muertes naturales se quedan en el Hospital Escuela.
“Hacemos un llamado a la población de que se acerque a la morgue del Ministerio Público para constatar si sus seres queridos desaparecidos están aquí”, recomendó Issa Alvarado.
En lo que va del 2020 se han realizado dos inhumaciones con el entierro total de 70 cadáveres en un cementerio propiedad de esa dependencia ubicada en la salida de Tegucigalpa hacia Olancho.
Con los 40 cuerpos que se registran actualmente, se dará un compás de espera a familiares, de unos meses más y posiblemente se desarrolle el tercer entierro masivo a finales de noviembre o inicios de diciembre.
