TEGUCIGALPA.Como una medida “arbitraria y caprichosa” calificó la Corte Suprema de Estados Unidos la decisión de Donald Trump en 2017 de rescindir el programa Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA, por sus siglas en inglés) que protege de la deportación a unos 700.000 jóvenes indocumentados en EE.UU., los llamados dreamers (“soñadores”).
En una resolución con 5 votos a favor y 4 en contra, los jueces del máximo tribunal estadounidense ratificaron este jueves fallos de cortes inferiores que calificaron de ilegal la decisión de Trump de poner fin al programa creado en 2012 por su predecesor Barack Obama.
El juez conservador John Roberts se alineó con los cuatro jueces progresistas para determinar que las acciones del gobierno fueron “arbitrarias y caprichosas” bajo la ley federal de Procedimiento Administrativo.
Este fallo significa que casi 700.000 jóvenes indocumentados inscritos en DACA que entraron en EE.UU. sin papeles cuando eran niños, la mayoría nacidos en México y otros países latinoamericanos, seguirán protegidos de la deportación y podrán aspirar a obtener permisos de trabajo renovables cada dos años.