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Previo a la temporada de ciclones que comenzará en junio, la Organización Meteorológica Mundial presentó la lista oficial de nombres que se le darán a estos fenómenos naturales que, según esta organización, serán 13, no obstante, este dato puede variar.
Arlene, Bret, Cindy, Don, Emily y Franklin encabezan la lista de 21 nombres de huracanes y ciclones para el Océano Atlántico y Mar Caribe 2023, mismos que se repetirán dentro de seis años, cuando finaliza el ciclo.
“La Organización Meteorológica Mundial cuenta con listas anuales de 21 nombres masculinos y femeninos que se van alternando, cada año la lista cambia y cada seis años se completa un ciclo e inician nuevamente con los primeros nombres de la lista”, explicó Josué Mejía, coordinador de la Unidad de Meteorología de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH).
No obstante, si los fenómenos naturales son de gran magnitud y devastación, por el impacto que dejan a su paso, se anula el nombre que se empleó de la lista vigente y la Organización Mundial de Meteorología selecciona otro nombre para reemplazarlo.
De acuerdo con Mejía, para este año se pronostican 13 tormentas tropicales, de las cuales seis serán huracanes categoría 1 o 2 y dos pueden llegar a ser categorías 3, 4 o 5. Cabe mencionar que cada una de estas cifras está ligeramente por debajo de la media típica de la temporada de 14 tormentas con nombre, siete huracanes y tres huracanes mayores.
Asimismo, Mejía explicó que este año se presentará el fenómeno de El Niño, por lo que se prevé que la cantidad de ciclones tropicales sea más baja, esto debido a que tradicionalmente El Niño inhibe la actividad ciclónica, mientras que La Niña o las condiciones neutras del ENOS (El Niño-Oscilación del Sur) crean un entorno más favorable para el desarrollo de ciclones.
Historia de los nombres de ciclones
Antes y durante muchos años los huracanes eran nombrados en honor al santo cuya festividad coincidía con la fecha cuando ocurría, después empezaron a usar letras y números, pero la nomenclatura era muy confusa, entonces la dejaron y en los años 50’s utilizaron nombres más cortos y fáciles de recordar, que llevaran una secuencia alfabética.
En el pasado se usaban únicamente nombres femeninos para referirse a las tormentas tropicales, especialmente en el Atlántico y en el Pacífico Norte, y fue a partir de 1979 que se comenzaron a utilizar nombres masculinos alternándolos con nombres femeninos.
