Una madre emprendedora en el área de la repostería murió ultimada a balazos en presencia de su pequeña hija de seis años durante un atentado atribuido a un sicario en motocicleta en un sector de San Manuel, Cortés en la costa norte de Honduras.
La microempresaria Wendy Aracely Ramos, salió de su negocio, con su hija agarrada de la mano. con dirección a su vivienda, cuando fue interceptada por el criminal en un hecho sangriento condenado por la población porteña.
Elementos policiales revelaron que al momento del ataque, la mujer soltó a su pequeñita hacia un lugar seguro, entre gritos desconsolados pidiendo misericordia, entre oídos sordos del pistolero. El cuerpo de la madre quedó tirado en una de las calles de la aldea La Canaán.
Personas que transitaban por el lugar al percatarse del atentado criminal, corrieron para apartar a la pequeña, que se resistía a despegarse del cadáver.
hasta esta tarde, agentes de investigación desconocían las causas de esta nueva muerte violenta, así como la identidad del victimario.
El Centro de Derechos de Mujeres (CDM) en Honduras reportó hasta el 30 de septiembre de 2020 195 muertes violentas de mujeres en circunstancias similares, según un monitoreo de medios de comunicación.
Sin embargo, la cantidad de homicidios podría sobrepasar en forma alarmante incluyendo crímenes que no trascienden cometidos en sectores apartados.
Los departamentos con mayor número de muertes de féminas son Cortés, Francisco Morazán y Yoro, en su mayoría quedan en la impunidad, pese a que existe una unidad creada con el propósito de investigar, esclarecer y castigar a los homicidas.