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El Comisionado Nacional de los Derechos Humanos (CONADEH), advirtió que cuando se restringe la libertad de expresión o la libertad de prensa no solamente se afecta el derecho humano individual para expresarse sino que también se lesiona el derecho colectivo de la ciudadanía a recibir información por parte de los medios de comunicación.
El ente estatal recordó el compromiso del Estado hondureño de garantizar el respeto a las libertades de expresión, de pensamiento y de prensa, en su pleno y libre ejercicio.
Además, destacó el valor esencial que tiene, para la sociedad hondureña, la libertad de expresión, como un derecho que abarca a la sociedad en su conjunto y no solo a la persona que lo ejerce.
El pasado 27 de febrero de 2017 se publicaron, en el Diario Oficial La Gaceta, las reformas al Código Penal aprobadas por el Congreso Nacional.
Según el artículo 335-B de dichas reformas, sobre la Apología e Incitación de Actos de Terrorismo “Quien públicamente o a través de medios de comunicación o difusión destinados al público hiciere apología, enaltecimiento o justificación del delito de terrorismo o de quienes hayan participado en su ejecución o incitare a otro y otros a cometer terrorismo o financiamiento de éste, debe ser sancionado con pena de cuatro (4) a ocho (8) años de prisión”.
De acuerdo al CONADEH, ningún país debe permitir la apología del odio, la incitación a la discriminación, la hostilidad o la violencia o cualquier acción similar contra cualquier persona o grupo de personas.
Sin embargo, considera que no se pueden legalizar procedimientos contrarios a parámetros internacionales que restrinjan, disminuyan o limiten la libertad de expresión.
Agregó que debe respetarse el derecho a decir la verdad y que no se puede prohibir a un periodista o medio de comunicación que la ponga de manifiesto y a que calle los hechos objetivos, agraden o no a determinado sector.
Reiteró que la libertad de expresión hay que respetarla y que debe garantizarse su pleno y libre ejercicio.
El pasado miércoles, miembros del Colegio de Periodistas de Honduras (CPH) realizó plantones en diferentes regiones del país para reiterar que continuará en sesión permanente hasta lograr que el artículo 335-B sea derogado ya que transgrede garantías constitucionales, la Convención Americana y la Ley de Emisión del Pensamiento.
El CPH ve con suma preocupación que dicha disposición sigue vigente y representa una amenaza para el libre ejercicio del periodismo en Honduras y la libre emisión del pensamiento en todas sus manifestaciones.
Otras “manchas” a la labor periodística
La lucha contra la impunidad y contra la perpetuación de las arbitrariedades no ha sido fácil ni para los periodistas ni para los medios ya que, en los últimos años, esta labor ha tratado de ser silenciada y obstaculizada con variadas acciones contra las libertades de expresión y de información.
Amenazas, agresiones, atentados, querellas en los tribunales, solicitudes de asilo para salvaguardar la integridad física y la vida, así como la muerte en circunstancias violentas de 70 personas ligadas a medios de comunicación, marcan la labor periodística en el país, en los últimos años, situación que convierte esta profesión en una labor de alto riesgo.
A lo anterior se suma, la aprobación, por el Congreso Nacional, y la publicación, en febrero de 2017, de las reformas al Código Penal, principalmente del artículo 335-B que violenta la Constitución de la República, la Ley de Emisión del Pensamiento y convenios internacionales suscritos por Honduras .
El ejercicio del periodismo se ha convertido en una tarea difícil de realizar principalmente para quienes dan cobertura a hechos relacionados con el crimen organizado, el narcotráfico, violaciones a los derechos humanos y los actos corrupción gubernamental.
La violencia que ahora alcanza a los periodistas, se constituye en una franca amenaza a la libertad de pensamiento y de expresión, ya que se atenta contra el derecho a la vida, al trabajo, a la libre emisión del pensamiento y al derecho de informar libremente.
