Un avión de la compañía aérea Eurowings, filial de bajo costo de la alemana Luftansa, aterrizó con carácter de emergencia en el aeropuerto internacional de Praga-Ruzyne. Esto tras detectarse humo en el compartimento de carga.
El avión, un Airbus, con 90 pasajeros a bordo, volaba de Hannover a Viena y aterrizó en la capital checa a las 17:03 GMT “sin problemas”. Así lo aseguró la portavoz del aeropuerto, Marika Janouskova.
Eso sí, tres vuelos tuvieron que ser desviados, de ellos uno procedente de Madrid, que aterrizó en Brno, segunda ciudad de la República Checa, situada a 200 kilómetros al sudeste de Praga. Según indicaron los bomberos al diario “Právo”, la razón del aterrizaje de emergencia fue la existencia de humo en el compartimento de carga. Pero no se trató de un incendio.
Estado de emergencia
En el aeropuerto “fue decretado estado de emergencia, y al aterrizar el aparato estaban los equipos de sistema integrado de socorro. Incluidos los bomberos del aeropuerto. El avión aterrizó sin problemas”, explicó Janouskova al rotativo. Aseguró que ni los pasajeros ni la tripulación se vieron afectados.
La interrupción de tráfico en el aeropuerto obligó a desviar también a un avión procedente de Viena, que retornó a la capital austríaca. Mientras que un tercero procedente de Moscú aterrizó en la ciudad alemana de Dresde. Seis vuelos tuvieron que esperar en el aire la señal para aterrizar en Praga.
El tráfico aéreo se ha reanudado con normalidad pasadas las 18.00 GMT, cerca de una hora después del aterrizaje del aparato de Eurowings, según Janouskova.