MÉXICO. Con una amplia ventaja, Andrés Manuel López Obrador derrotó a los partidos tradicionales que llevaban décadas en el poder. Sus principales contrincantes, Meade y Anaya, reconocieron ya su victoria.
López Obrador, “AMLO”, como es conocido aquí, líder del Movimiento Regeneración Nacional (Morena), se imponía en la contienda electoral para suceder al presidente Enrique Peña Nieto y obtendría el 49% de los votos, según “encuestas de salida” del diario El Financiero y Consulta Mitofsky.
AMLO sacaba una amplia ventaja sobre Ricardo Anaya, candidato de una coalición liderada por el derechista Partido de Acción Nacional (PAN) y el izquierdista Partido de la Revolución Democrática (PRD), y José Antonio Meade, candidato oficialista del Partido Revolucionario Institucional (PRI). Ambos candidatos reconocieron rápidamente su derrota.
Con su victoria concedida por sus rivales, López Obrador se convertirá en el próximo presidente de México, y llevará a la izquierda al poder por primera vez en democracia con un mandato para desplegar una “transformación radical”. Su principal promesa fue erradicar la corrupción.
Las demás resultados de las elecciones
Además de nuevo presidente, los cerca de 90 millones de mexicanos aptos para votar podían elegir 500 diputados federales, 128 senadores y nueve gobernadores, según datos del Instituto Nacional Electoral (INE) de ese país.
En su tercer intento por llegar al poder, Andrés Manuel López Obrador logró capitalizar el descontento generalizado que existía contra el sistema político tradicional en México y los escándalos de la administración de Enrique Peña Nieto, como la investigación contra su esposa por haber comprado una residencia de lujo con un enorme descuento de parte de un contratista del gobierno o la evidencia de espionaje ilegal a periodistas y activistas de derechos humanos en el caso de la desaparición de 43 estudiantes.