Un alcalde mexicano se casó con un cocodrilo este fin de semana para traer abundancia a la ciudad que dirige.
Es una tradición que se remonta siglos atrás en el pueblo de San Pedro Huamelula, en el estado de Oaxaca, al sur de México.
Antes de la ceremonia, la novia reptil, vestida de blanco, desfila por la ciudad.
La ceremonia simboliza la unión de dos grupos indígenas, los chontales y los huaves (también conocido como mareños).
Ambos vivieron en conflicto en la época prehispánica, cuando los huaves llegaron a la tierra donde vivían los chontales en la costa del Pacífico, informó la agencia de noticias EFE.
De acuerdo con la leyenda, el conflicto entre los grupos terminó cuando el hijo del rey de los chontales y la hija del rey de los Huales se enamoraron y se casaron.
En nuestros días, el alcalde de San Pedro Huamelula representa al príncipe de los chontales y el cocodrilo reptil es la princesa del pueblo huale.
El alcalde, Víctor Aguilar, dijo que “los mareños la llaman princesa (al cocodrilo) y mi papel es ser el marido de la princesa”.
Después de la ceremonia, hay música y el baile, incluyendo un baile entre el reptil y el novio.
La boda es parte de las festividades en honor a San Pedro, patrón de la ciudad.
(Fuente: CNN)