La Fundación Martin Luther King (MLK), y otras organizaciones afrodescendientes hondureñas, reflexionaron sobre la lucha por defender los derechos civiles de los negros en Honduras y los Estados Unidos de América.
La actividad, auspiciada por el Foro Nacional de Convergencia (FONAC), se llevó a cabo en el marco del 93 aniversario del nacimiento de Martin Luther King Jr., y en el mismo, líderes de la comunidad negra en Honduras, exigieron mayor participación para las mujeres y proyectos sociales que impacten positivamente en las comunidades afrodescendientes; “la mujer debe tener más oportunidades y las oportunidades de los negros en Honduras, deben construirse a través de un sistema educativo moderno y sólido” expresó Lloyd Emmanuel Allen, obispo de la Iglesia Episcopal de Honduras, durante su disertación en el panel central del evento.
Del mismo modo, las organizaciones afrodescendientes demandaron la eliminación de la discriminación racial en Honduras; “representamos más del 7% de los habitantes de este país y en consecuencia merecemos mayor representación política y atención a nuestras demandas” dijo Tomas Ramírez, líder político garífuna y diputado electo del Congreso Nacional por el departamento de Atlántida.
Roy Guevara Arzú, presidente del Centro para el Desarrollo Comunal (CEDECO), quien hizo uso de la palabra durante el panel “Legado, vida y obra del Dr. Martin Luther King Jr.”, condenó la impunidad con la que se cubren muchas agresiones en contra de la comunidad negra en Honduras, por lo que exigió a las autoridades del Estado investigar los crímenes perpetrados en los cuales se han perdido la vida de valiosos integrantes de la comunidad afro descendiente en el país.
René García, presidente de la Fundación MLK, adecuó a la realidad afrodescenciente hondureña el discurso más famoso reverendo Martin Luther King Jr., “Yo tengo un sueño”, y destacó que el mismo se refería “al deseo de un futuro en el cual la gente negra y blanca pudiesen coexistir armoniosamente y como iguales”.
Durante el evento el secretario ejecutivo del FONAC, señaló que, “la lucha persistente y pacífica que libró Martin Luther King Jr. por los derechos civiles de los afrodescendientes y contra el repugnante racismo y la inaceptable discriminación fue una admirable gesta que aun hoy tiene un impacto positivo en los Estados Unidos de América y el mundo entero; por esa razón para el FONAC, un gusto apoyar la realización de este evento tan importante en donde el pensamiento -de Martin Luther King Jr.- será analizado y promocionado para que sirva de guía a una sociedad hondureña ansiosa de cambios, reivindicaciones y respeto a la dignidad humana”.
El conversatorio sobre la lucha de los derechos civiles de las comunidades afrodescendientes fue acuerpado por la Embajada de los Estados Unidos de América en Honduras, quien estuvo representada por Regina Jun, Directora de Programas de Inclusión Social de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), en Honduras, quien recalcó que “la memoria de Martin Luther King Jr., debe permanecer en la historia del desarrollo social y cultural de los pueblos afrodescendientes para que su lucha y sus derechos, sean respetados”.
Al evento, asistieron dirigentes de la sociedad civil, autoridades estatales y representantes de la cooperación internacional, entre quienes destacan el dirigente obrero José Luís Baquedano, el académico Pedro Quiel, el consejero suplente del Consejo Nacional Electoral (CNE), German Lobo, y la diputada Johana Bermúdez.
MARTIN LUTHER KING, JR.
Martin Luther King, Jr., nació el 15 de enero de 1929, en Atlanta, Georgia, Estados Unidos de América, y murió el 4 de abril de 1968 en Memphis, Tennessee. Fue ministro bautista y activista social que lideró el movimiento por los derechos civiles en Norteamérica desde mediados de la década de 1950 hasta su muerte por asesinato en 1968. Su liderazgo fue fundamental para el éxito de ese movimiento para poner fin a la segregación legal de los afroamericanos en el sur y otras partes de los Estados Unidos. King saltó a la fama nacional como líder de la Conferencia de Liderazgo Cristiano del Sur, que promovió tácticas no violentas, como la marcha masiva en Washington (1963), para lograr los derechos civiles. Fue galardonado con el Premio Nobel de la Paz en 1964.