El Sistema de Naciones Unidas en Honduras (SNU) espera que la jornada electoral de este domingo 28 de noviembre sea una verdadera fiesta cívica, en la que las hondureñas y los hondureños puedan participar y ejercer su derecho al sufragio de manera informada y pacífica, en condición de igualdad, sin ningún tipo de discriminación y en plena garantía de los derechos humanos.
La meta de un mundo más justo que plantea la Agenda para el Desarrollo Sostenible 2030 sólo se podrá alcanzar si hay más democracia, por lo que las elecciones participativas, inclusivas, pacíficas y transparentes son un elemento clave para la paz social que tanto anhela el pueblo hondureño. De allí que, a través de los proyectos de asistencia electoral, el Sistema de las Naciones Unidas continúa asesorando y asistiendo a las autoridades electorales del país.
Cabe precisar que el Sistema de las Naciones Unidas no realiza ningún tipo de observación electoral. Reconocemos la importancia de, y saludamos, la presencia de las misiones internacionales de observación, y nacionales de la sociedad civil, cuyo trabajo fortalece la transparencia y credibilidad del proceso.
Como lo hemos expresado antes, y recientemente la Alta Comisionada de las Naciones Unidas lo ha reiterado en una declaración; rechazamos los actos de violencia en el contexto electoral y exhortamos a las autoridades a investigar estos crímenes de manera rápida, exhaustiva e imparcial.
De acuerdo con su mandato, la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (OACNUDH) realiza un monitoreo de la situación de derechos humanos antes, durante y después de las elecciones.
El Sistema de Naciones Unidas en Honduras hace un llamado a todas las autoridades del país, y en particular a los candidatos, las candidatas y líderes de los partidos políticos, a dirimir sus diferencias y conflictos mediante los mecanismos establecidos en la legislación vigente, y a esperar con calma y respetar los resultados oficiales del Consejo Nacional Electoral (CNE). De su comportamiento depende, en gran parte, que estas elecciones sean llevadas a cabo de una manera creíble, inclusiva y pacífica.
El Sistema de las Naciones Unidas confía que se respetará la voluntad de la ciudadanía y a la institucionalidad electoral.