Primicia Honduras Diario Digital 
La directora del Observatorio de la Violencia de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (OV-UNAH), Migdonia Ayestas, reaccionó este jueves ante la derogación de la ley que prohibía la circulación de dos hombres a bordo de una motocicleta.
La titular del OV-UNAH, lamentó que los diputados del Congreso Nacional tomaran tal determinación, explicando que no solo se deben basar en la tasa de homicidios pues se deben evaluar los móviles que generalmente son perpetrados por criminales a bordo de motocicletas.
‘El año pasado la violencia y la criminalidad cerró con una tasa de 44.9 por cada 100 mil habitantes, ¡señores Diputados, es la tasa más alta de Centroamérica!’, señaló Ayestas al tiempo que agregó que ‘es también una de las tasas más altas del mundo y eso se vuelve un problema aunque en Honduras haya disminuido, siempre expone al país y que sin estar en guerra hay tanta violencia y criminalidad’.
La funcionaria afirmó que el año pasado fueron más de 4 mil homicidios los que ocurrieron en Honduras y este año se registra en promedio unos 3 mil hasta el mes de diciembre.
‘Cuando vemos esta tasa de violencia y criminalidad medida en tasa de homicidios, no solo es decir en cuanto bajó, es ver mis posibles o los móviles, ¿Por qué están matando a los hondureños?’, cuestionó.
‘Es contraproducente que sólo piensen y legislen en base a un número porque como ya he dicho yo, es el único indicador que ven y precisamente se tiene que analizar los posibles móviles, cuando muere violentamente una persona generalmente y más o menos en un 65 por ciento tiene que ver con la criminalidad organizada, específicamente narcotráfico, narcomenudeo, o tráfico de armas’, apuntó.
‘Cuando le dan muerte a una persona usan un automotor que generalmente es una motocicleta, donde van dos hombres y recuerde que ahora también están usando a las mujeres en esas medidas para que puedan salir y entrar rápidamente en una moto a una escena del crimen’, expresó.
‘Esto convierte a los automotores especialmente a las motocicletas en un problema en el país y la medida tenía que ver para reducir las muertes violentas’, adujo la coordinadora del OV-UNAH.
Ante el proceder de los diputados, Ayestas señaló que por acciones y determinaciones como la derogación de esa ley es que los congresistas se han ganado la desconfianza del pueblo, que se ve azotado por el crimen organizado.
‘Aquí no se fijaron o no analizaron, lastimosamente y por eso es que la ciudadanía y la población en cuanto a percepción de inseguridad y victimización los califica en el último lugar por desconfianza y por eso es que la ciudadanía no confía’ añadió.
‘Un 13.9 es el porcentaje de confianza que tiene la ciudadanía en el Congreso Nacional en los diputados y diputadas de su departamento, lastimoso que solo legislen en base a ellos y no en la ciudadanía y el pueblo que es al final el que padece toda esta pandemia que también tiene que ver con la violencia y la criminalidad’, finalizó.
