El Comisionado Nacional de los Derechos Humanos y Presidente del Consejo Centroamericano de Procuradores y Procuradoras de Derechos Humanos, Dr. Roberto Herrera Cáceres: reiteró el llamado urgente a atender las emergencias que enfrentan las personas afectadas, en sus condiciones de vida, bienes, comunidades y medio ambiente, como consecuencia de los últimos eventos climáticos catastróficos de los huracanes Iota y Eta, los cuales se suman a los de la persistente pandemia del COVID19 y la epidemia del Dengue.
El Ombudsman dijo que se ha constatado la urgencia y la necesidad de la acción inmediata de ayuda solidaria mutua entre los Estados centroamericanos, complementada por cooperación Internacional para dar una respuesta esperada a la seguridad humana de los millones de habitantes centroamericanos, afectados por todos esos fenómenos naturales.
Recomendó proceder a la coordinación, complementación y cohesión centroamericanas que faciliten una utilización racional, ordenada y verificable de la cooperación internacional esperada para la implementación de acciones de rehabilitación y reconstrucción innovadora y resiliente de las áreas de vida, comunicación y trabajo de las comunidades centroamericanas afectadas, y de medidas con alternativas económicas que posibiliten, a las personas damnificadas, retomar sus proyectos de vida.
Asimismo, agregó que se debe asegurar el uso adecuado, honesto y socialmente eficaz de los recursos propios centroamericanos y de los recibidos de fuentes internacionales, informar sobre su utilización y eficacia social con respecto a las personas necesitadas, velando por su seguridad, salud física y mental, y medios que les ayuden a asegurar condiciones de vivienda y, en general, de vida digna.
Exhortó a que: “Con la fuerza soberana de los ocho pueblos de los Estados miembros del Sistema de Integración Centroamericana, reafirmemos la solidaridad que debe caracterizar siempre a nuestros Estados, para fomentar la seguridad humana y el desarrollo sostenible en Centroamérica”.
Precisó que debe rechazarse frontalmente males públicos como: corrupción, usura, explotación del hombre por el hombre, especulación ilícita en los precios de la canasta básica, medicamentos esenciales e insumos de bioseguridad; estigma y discriminación, desinformación, mal funcionamiento de los servicios públicos y abuso de autoridad.
“Debemos utilizar ordenadamente recursos y capacidades de lucha contra las amenazas actuales, construyendo, al mismo tiempo, la base de la resiliencia y transformación integral de Centroamérica, para que, desde los municipios, se cumpla con los compromisos estatales con el bienestar y justicia económica y social de los pueblos centroamericanos”, concluyó el Dr. Herrera Cáceres.