Marco Bográn y Alex Moraes ex funcionarios de Inversiones Estratégicas de Honduras (Invest-H), recibieron un auto de formal procesamiento con medidas distintas a la prisión preventiva, significa que se podrán defender en libertad en el primer requerimiento de malversación de caudales públicos en perjuicio de la Administración Pública del Estado de Honduras.
En el caso de Moraes, fue separado de su cargo como administrador general de Invest-H. Ambos no podrán salir del país, presentarse a firmar a los tribunales de justicia, no tener comunicación con empleados de Inversiones Estratégicas de Honduras, ni tampoco acercarse a esa institución y pagar una fianza de 100 mil lempiras.
En ese requerimiento, de acuerdo a la relación de hechos, en marzo pasado cinco funcionarios de Invest-H iniciaron una gira de trabajo a diferentes ciudades del país donde estarían ubicados los hospitales móviles comprados a Turquía.
Al terminar sus labores y regresar a la capital se les informó que por 15 días estarían alojados con todos los gastos pagados en un hotel de la ciudad, argumentándose que se hacía como parte del aislamiento que los protocolos de bioseguridad exigían para personas que habían tenido contacto con pacientes positivos de COVID-19.
Ese alojamiento generó un gasto del presupuesto de Infraestructura de 101 mil 199.40 lempiras.
Por la tarde, se programó la audiencia de declaración de imputado, en el segundo requerimiento librado por el delito de violación a los deberes de los funcionarios, donde los defensores legales esperan también un auto de formal procesamiento con medidas distintas a la prisión preventiva.
En este caso se le acusa de otorgar un contrato de supervisión a un pariente propietario de una empresa, violentando la Ley de Contratación del Estado.
Se trata de la supervisión de una obra en la que se construiría el plantel de uno de los hospitales móviles que funcionará en el municipio de Santa Rosa de Copán, en el occidente de Honduras.